'Territorio Soplao' contará con un museo del ámbar tras el «excepcional» hallazgo

El yacimiento de ámbar del Cretácico que se descubrió hace meses en el 'Territorio Soplao' promete tanto que el Gobierno cántabro «enriquecerá» su idea inicial de crear un museo dedicado a la mineralogía con un centro específico de esta resina fósil. Así lo anunció ayer el consejero de Cultura, Javier López Marcano, ante varios investigadores que respaldaron la importancia del hallazgo: los estudios señalan que el yacimiento de Rábago aportan pruebas de cómo se formó el ámbar y de qué vegetal procede. Su origen está en un gran paleoincendio y el lugar es de «excepcional interés» tanto desde el punto de vista geológico como paleontológico.

López Marcano recordó que ya en la segunda fase de su plan para la zona se contemplaba un proyecto museológico, pero la marcha que llevan los análisis sobre el lugar refuerzan la idea inicial y «en la plaza del Monte habrá un museo del ámbar». A la vista de la dimensión que va adquiriendo el descubrimiento de El Soplao, el verano próximo se continuará con la excavación.

Raro e inusual

La primera, realizada entre el 20 y el 31 de octubre, ha revelado que el depósito de este material es grande «e inusual», según explicó Idoia Rosales, coordinadora de la misma. También es de destacar que la mayor parte de la materia encontrada es azul-púrpura, otra rareza añadida, tal como adelantó hace dos semanas EL DIARIO MONTAÑÉS, que avanzó que el yacimiento se considera único.

Varios científicos que colaboran con el Gobierno regional presentaron ayer sus primeras impresiones ante una veintena de medios de comunicación y aseguraron que el yacimiento es uno de los mejores del mundo (por supuesto, de España y Europa) y que su potencialidad es enorme. Por ejemplo, las piezas de ámbar se están obteniendo a mano y con facilidad, lo que ha llevado a la Administración cántabra a vallar el punto de la extracción, al borde mismo de la carretera que lleva hasta la cueva del Soplao. La zona está bajo vigilancia 24 horas al día para evitar problemas.

Varias pruebas

En el acto de ayer se dio a conocer el hecho de que la «bolsada» encontrada tiene al menos de 25 metros de longitud y un metro y medio de grosor. Javier Delclós, paleontólogo de la Universidad Central de Barcelona, afirmó que «muy probablemente» este lugar sea «la prueba de que un grupo de coníferas (las frenolopsis) fue el productor del material. Esto es extremadamente raro».

Enrique Peñalver, del Instituto Geológico y Minero de España (IGME), expuso, por su parte, que junto al ámbar se ha encontrado un tipo de carbón vegetal, «fusinita», que procede de una madera que se quemó muy rápido. Esto sugiere que en ese bosque se produjo en el Cretácico un gran incendio que arrasó toda la cubierta vegetal. El ámbar y demás restos habrían sido transportados por los ríos hacia el mar.

En la presentación de los primeros resultados de la investigación hubo momento para descender a los números. Según explicó el consejero de Cultura, el hallazgo ha sido fruto del convenio con el IGME para llevar a cabo siete proyectos de investigación. Estos han supuesto un desembolso de 95.000 euros aportados a partes iguales por los firmantes del acuerdo.

En el acto también estuvo presente Juan de Miguel, presidente de la constructora SIEC, a quien López Marcano agradeció su apuesta por el proyecto. Su inversión inicial fue de cinco millones de euros, desveló. De Miguel se mostró muy satisfecho de los resultados de su colaboración con la administración pública cántabra y aseguró que ésta se mantendrá en los próximos años, «a pesar de la difícil situación económica actual».