Un antes y un después para la ría del Carmen

Generalmente, de forma periódica, irrumpen en la actualidad con independencia del ámbito más o menos local noticias o proyectos llamados a cambiar el día a día de la gente, ya sea por su impacto económico o por la mejora de la calidad de vida que lleva implícita la iniciativa. De la totalidad de planes saludados como transformadores del entorno por suponer un antes y un después, la gran mayoría se queda en el camino o no cumple con las expectativas, por lo que solo un pequeño porcentaje se atiene a lo expuesto durante la presentación inicial. Sin embargo, Camargo avanzó la semana pasada un descubrimiento que sí que puede sacudir para bien el municipio.

La ría del Carmen podrá quedar descontaminada de los metales pesados que dominan su lecho en un plazo de diez años, logro cuyo plazo inicial coqueteaba con el siglo. El tremendo avance reposa principalmente en las investigaciones de la Asociación Ría acerca del uso de la técnica de la fitorremediación con carrizo, una planta del entorno que entre sus cualidades tiene la de acabar con los elementos tóxicos ubicados en los sedimentos estuáricos.

El estudio, que comenzó en 2012, se halla enmarcado dentro del Plan Rialab financiado por el Ayuntamiento. Según el portavoz de la Asociación, Diego Cicero, las investigaciones han arrojado "de manera inequívoca" que el carrizo es "eficiente y efectivo" en la descontaminación de los sedimentos afectados por metales pesados.

Sentada estas premisa, Cicero entró en detalle. La tasa media de reversión se sitúa en el 12% anual respecto a los elementos más tóxicos como el mercurio, el níquel, el arsénico, el cadmio, el plomo, el cromo, el cobre o el zinc. Con esa progresión, los investigadores coligen que, en el caso específico de la ría del Carmen, "empleando la fitorremediación tendríamos unos plazos de descontaminación de entre uno y seis años en las zonas menos afectadas", mientras que en los puntos con niveles mayores de contaminantes "tardaríamos entre uno y 10 años" en función del tipo de metal hallado. Son resultados "auténticamente rompedores", admitió, recordando el mencionado plazo inicial de una centuria para poder completar la rehabilitación ambiental de la zona.

El objetivo ahora pasa por poder empezar a trabajar sobre el terreno cuanto antes, para lo que se requiere dinero, mucho. Ría cuenta con el apoyo del Consistorio y de la Consejería de Medio Ambiente del Gobierno de Cantabria, pero necesita más recursos, por lo que prevé concurrir este año al Programa Life con intención de captar fondos europeos con los que iniciar la primera fase de la regeneración de la ría del Carmen, cuyo coste rondaría los cinco millones. Sobre el presupuesto total, los participantes del proyecto no han querido pronunciarse hasta tener presentado el anteproyecto técnico con el que concurran a la convocatoria para obtener financiación de Bruselas. La intención pasa por comenzar la limpieza en junio de 2018.

Con todo, admiten que si la vía de la Unión Europea falla, "se buscarán fórmulas alternativas" para poner en marcha la actuación. Además, tanto instituciones como investigadores admiten que Ferroatlántica tendrá un papel importante en el desarrollo del plan, no solo desde un punto de vista de poder apoyarlo económicamente. "Es fundamental que cese cualquier tiempo de contaminación que se esté llevando a cabo actualmente para que la limpieza llegue a buen puerto", señalan desde la Asociación Ría.

Idea de negocio

Los expertos pretenden convertir el know how obtenido en los estudios en una línea de negocio que pueda ser rentable y retroalimente financieramente nuevos proyectos y trabajos académicos. Por ello, la alcaldesa, Esther Bolado, y el edil de Industria, Eugenio Gómez, acompañaron el pasado miércoles en Madrid a Cicero y José Antonio Expósito, también de Ría, al II Encuentro Alcaldes+Innovadores celebrado por la Red Innpulso a la que pertenece el municipio.

Según detalló el Ayuntamiento en una nota de prensa, Cicero basó su exposición en mostrar la fitorremediación como una solución que puede ser de "gran interés" para "un tercio" de los 62 municipios representados en la Red Innpulso, ya que son los que tienen litoral y "muchos de ellos pueden tener la problemática de sedimentos contaminados similares a la que tenemos nosotros en la ría del Carmen".

Igualmente, también se dirigió a "aquellos municipios que tienen población dispersa y que requieren de herramientas alternativas para la depuración de aguas residuales", a través de una técnica "cuyos costes puedan asumir al ser más equilibrada" y que sea a su vez "más sostenible e integrada desde el punto de vista ecológico" como es la fitodepuración.

Con estos mimbres, Camargo aguarda con expectación el horizonte de la próxima década para acabar por fin con la contaminación de una ría afectada por la actividad industrial del entorno durante más de 150 años. Como concretó Cicero, "lo que iba a ver la generación futura, es posible que lo disfruten nuestros abuelos".