¿Quién era ese tal Walter White?

Tras dos años 'escondido' en Broadway rehabilitando su imagen como fabricante de droga -ganó un premio Tony gracias a su interpretación del presidente Lyndon B. Johnson en 'All the way'-, Cranston ha cambiado con éxito la pequeña por la gran pantalla. Ya había probado suerte en papeles secundarios ('Godzilla', 'Argo' o 'Pequeña Miss Sunshine') pero Hollywood no le abrió las puertas de par en par hasta que llegó de la mano del legendario Dalton Trumbo (1905-1976). Aunque esto siempre fue así porque el guionista de películas como 'Vacaciones en Roma' o 'Espartaco' sufrió la persecución, y posterior encarcelación, debido a la 'caza de brujas' liderada por el senador Joseph McCarthy.

Los cuatro maratones con los que cuenta en su haber ya le han enseñado a entrenar para una carrera de fondo. Así que, aunque su interpretación no fue suficiente para derrotar a Leonardo DiCaprio en la carrera por el premio Oscar, le han valido reservarse bajo el brazo otros seis filmes pendientes de estreno. O lo que es lo mismo, a sus 60 años ya no tendrá que preocuparse por la jubilación; ni volver a anunciar pastillas contra las hemorroides; ni retomar su inicial carrera como sacerdote; incluso, tampoco se verá obligado a recordar que él puso voz a los enemigos de los 'Power Rangers', Snizard y Twin Man, o que fue un episódico abogado, no de esos famosos que aparecen en 'The Good Wife' sino los caricaturizados en 'Sabrina, cosas de brujas'.

Infatigable carrera televisiva

Pero sus primeras incursiones televisivas no se limitaron a las ficciones juveniles siendo un camaleónico actor que, sin darnos cuenta, siempre ha estado presente en nuestras vidas: 'Falcon Crest', 'Se ha escrito un crimen', 'Canción triste de Hill Street', 'Flash', 'La ley de Los Ángeles'... e incluso los fans de anime podrán reconocer su voz en 'Macross Plus'. No busquen su nombre en los créditos dado que el cotizado curriculum como doblador lleva la firma de Lee Stone.

A pesar de lo que pudiera parecer, Bryan Cranston reconoce que se siente como pez en el agua realizando comedias, un género que probó en 'Seinfeld' -donde también participaron sus futuros compañeros en 'Breaking Bad', Anna Gunn y Bob Odenkirk- y, cómo no, 'Malcolm in the Middle'.

Entre una y otra, Vince Gilligan se cruzó en su vida. Lo que parecía una relación esporádica para un capítulo de 'Expediente X' -donde interpretó a un secuestrador racista al que David Duchovny intenta salvar la vida- se acabó convirtiendo en uno de los tándem de oro de la televisión durante los seis años que 'Breaking Bad' estuvo en antena a pesar de los iniciales recelos de la cadena AMC, la cual prefería a John Cusack o Matthew Broderick en el papel.

Durante estos años de éxito, Cranston no se olvidó de hacernos de reír y siguió haciendo sus pinitos delante de las cámaras -participando puntualmente en 'Cómo conocí a vuestra madre'- o detrás -dirigiendo dos capítulos de 'Modern Family'-. Tampoco dejó de lado su auténtica pasión, el béisbol, o mejor dicho, los Dodgers, su equipo de siempre y en cuyo estadio celebró su fiesta de 40 cumpleaños.

"Yo podría haber sido un buen contrincante", le dice Marlon Brando a su hermano en 'La ley del silencio' (1954), la película favorita de Bryan Cranston. Pocos querrán serlo de Cranston y si no que se lo pregunten a Jon Hamm que año tras año se quedaba sin galardones por su interpretación en 'Mad Men'. Y por si acaso alguien vuelve a decirle que lo de Walter White era sueños, se ha tatuado el logo de 'Breaking Bad' en uno de sus dedos para responderle.