Dime cómo son tus cejas y te diré de qué década son

Cuando llegó la pandemia y estábamos obligados a llevar marcarilla, los ojos se llevaron todo el protagonismo 'beauty' y, lo bueno, es que ahora, tengas las cejas que tengas, hay todo tipo de productos de belleza para cuidarlas y darles forma. Generalmente la mejor estética es la que presenta de forma natural cada una, pero en ocasiones es recomendable reducir su grosor, aumentar la distancia entre ellas o arquearlas un poco.

Mirando hacia atrás es curioso comprobar cómo hace un siglo las tendencias marcaron que las cejas debían ser «definidas, oscuras y delgadas». La página de maquillajes Kryolan recuerda que «la marca registrada de aquellas mujeres no sólo eran los vestidos flapper y los mechones cortos, sino también las cejas muy delgadas y definidas con la cola hacia abajo». En la década de 1930, las cejas se volvieron aún más delgadas con un arco simétrico mucho más exagerado y redondeado que se olvidó en los años cuarenta, cuando se optó por una apariencia más natural y comenzaron a dejar que sus cejas volvieran a crecer.

La década de 1950 marcó la Edad de Oro de Hollywood con actrices icónicas como Marilyn Monroe, Grace Kelly y Jayne Mansfield. Viendo fotos de aquella época se ve que las cejas se dibujaban con arco angular muy alto y se volvieron un poco más gruesas que décadas anteriores, con más definición y nitidez en los bordes.

La ceja de los sesenta fue un poco más gruesa en la parte delantera y la cola todavía se volivió más corta, terminando justo sobre la esquina del ojo, por encima del llamado hueso de la ceja. Llegamos a los setenta y encontramos dos tendencias: o muy finas o sin forma ni definición. En los ochenta se apostó por esta última tendencia y triunfaron las cejas naturales y peinadas, algo que al llegar a los noventa dio un giro y, cuanto más finas y depiladas con precisión, mejor. Ahí fue cuando a muchas mujeres se les fue, literalmente, la pinza y hoy vemos cómo recurren a técnicas como la micropigmentación o el microblading.

Llegamos a la década de 2010 y la moda decidió que las cejas debían ser gruesas, con arcos puntiagudos altos y pelos pintados individualmente si hacía falta. Y hoy estamos en un momento en el que todo vale aunque llevarlas perfectamente peinadas triunfa en cualquier alfombra roja.

Como apuntábamos al principio de este artículo, las cejas juegan un papel muy importante a la hora de profundizar la mirada y, además, contribuyen a conseguir un maquillaje perfecto. Unas cejas bien maquilladas y definidas cambian la expresión del rostro y para lograr un resultado de experta solo tienes que tomar nota de los productos adecuados que debes incluir en tu rutina 'make up':

El lápiz de cejas líquido de Paul and Joe tiene una punta de pincel muy fina para dibujar y definir con mayor precisión. Promete cubrir incluso los pelitos más finos

El 'eyeliner waterproof' de Paul and Joe es un lápiz ultrafino y resistente al agua para aplicar sobre las cejas y dibujarlas, pelo por pelo, y conseguir un resultado con una forma muy natural

Los polvos minerales Aina de Mô permiten cubrir los pelitos canosos de las cejas además darles forma. Pueden aplicarse con el bálsamo labial consiguiendo una fijación más duradera y un aumento de la intensidad del color. Sus ingredientes son 100% naturales y 100% veganos

El polvo de cejas permite aportar volumen para crear profundidad. Humedeciéndolo suavemente se consigue adherir a la piel sin difuminarse

El gel fijador Rouge Bunny Rouge Brown es un gel volumizador para cejas súper fácil y cómodo de usar. Fija e color y aporta una apariencia de abundancia, pero con un acabado muy natural