Arantza Montes de Neira: «Quiero que las cántabras sepan que hay otra forma de vestirse lejos de la exigencia»

Estudió Magisterio, además de estar al cargo de varios proyectos y dirección de obras de decoración. Con el descubrimiento de las redes sociales y los blogs de moda, Arantza empezó a colaborar con algunas tiendas de ropa hasta lograr lanzarse a los talleres y asesorías individuales tras verse inmersa en el mundo de la asesoría de imagen y 'personal shopper'. Sin embargo, esto se le quedaba corto, ya que en las sesiones salían temas de mayor preocupación. Por este motivo, durante la cuarentena, decidió dar el salto al 'Coaching' de Imagen. Además, es madre de tres niños, dos de ellos mellizos, los cuales fueron, según la cántabra, los protagonistas de la mejor y peor época de su vida.

-¿En qué consiste tu proyecto 'Mamás de Purpurina'?

-Consiste en aplicar todas esas herramientas de 'Coaching' de Imagen para ayudar a las mamás a redescubrirse de nuevo, a reconciliarse con los cambios de su cuerpo, a que sean conscientes de lo valiosas que son, de lo importante que es cuidarse, tenerse en cuenta y que todo ello les lleve a vestirse con bondad. El fin es que construyan un estilo auténtico y disfrutar mucho con su ropa.

-¿Cómo surgió la inspiración?

-Descubrí mi interés por ayudar a las madres a raíz de un curso de 'Coaching' de Imagen. Fue algo que sentí muy fuerte en el corazón. Yo había vivido la maternidad muy intensamente, había sufrido sus consecuencias y vi claro que era desde dónde mejor podía acompañar, comprender y escuchar sin juzgar.

-¿Cómo nació el nombre?

-'Mamás de Purpurina' me inspiró ternura, diversión, aceptación, alegría, luz, esperanza, valía personal… La purpurina me evocaba todo lo bueno que hay en nosotras, lo que nos hace brillar y lo que nos hace únicas. En ese momento tenía por ahí cerca a mi hija Teresa, le pregunté qué le parecía y entre las dos decidimos que era el nombre perfecto.

-¿En qué se basan tus cursos?

-Depende del formato. Los talleres los centro en temáticas más concretas y hago que todo gire en torno a ese concepto. En los cursos se trabajan muchos más aspectos de la persona, tirando de un hilo conductor como puede ser el tema del armario. Aún así, en todos ellos para mí es esencial transmitir la visión de la imagen como un todo (interior, cuerpo y estética).

-¿Son 'online' o presenciales?

-Antes de la cuarentena lo hacía todo presencial y a raíz de ella no quedó más remedio que digitalizarse. De esa forma pude llegar a mujeres de diferentes puntos de España. Así que ahora trabajo de ambas maneras, según lo requiera cada taller, curso, acompañamiento o proyecto.

-¿Cuáles son los problemas a los que una persona (en este caso una madre) se enfrenta a la hora de elegir qué ponerse?

-En general, la falta de tiempo para ella supone una dificultad. Eso hace que casi siempre se vista igual. Otra dificultad son los cambios que ha experimentado su cuerpo, los complejos físicos, la autocrítica y la exigencia tan feroz de la sociedad hacia el cuerpo de la mujer. También me he dado cuenta de que la necesidad de comodidad en su looks para afrontar el día se ha llevado por delante en muchas ocasiones su estilo personal. Otras muchas veces, el cansancio, las dificultades, el no llegar a todo, la autoexigencia de tener que llegar a todo, el sentirse malas madres, el sentimiento de culpa...

-¿Cómo afecta el verse bien con nuestro estilo y nuestra ropa al estado de ánimo y modo de vida?

-A mi modo de verlo, eso es importante siempre y cuando esté fundamentado en el interior. Que lo de fuera sea coherente con lo que tú eres de verdad y con lo que necesitas, eso es lo brutal. Si no, no deja de ser un parche. La imagen externa es la que más está influenciada por el ego. En un momento te puede ayudar el verte guapa para tirar para adelante con el día, darte algo de seguridad y sentirte bien, pero eso es efímero. Al quitártelo sigues estando contigo misma, con tus inseguridades, tus problemas, tus complejos, tus circunstancias...

-¿Qué quieres transmitir con el lema 'vístete con bondad'?

-Que hay otra forma de vestirse lejos de la exigencia, de las normas del modelo de belleza imperante, del aparentar, de las tendencias, de lo que se supone que combina o no, de lo que te limita…Vestirse con bondad es una visión de la imagen en la que hay flexibilidad, experimentación, creatividad y autenticidad.

-¿Cómo nació la idea de también vender collares?

Tenía ganas de crear algo que las mujeres pudiesen llevar que les recordara que, a pesar de sus imperfecciones y de las dificultades de la vida, seguían siendo de purpurina. Al principio pensé en una camiseta, pero al poco me di cuenta de que siempre me habían encantado los collares, los pendientes, los anillos... Así que me puse manos a la obra y diseñé un modelo de collar personalizable con cadena en acero.

-Si sólo pudieras dar un consejo a estas personas que acuden a ti, ¿cuál sería?

-Que sean conscientes de la realidad que las limita: qué les hace sufrir, de qué tienen miedo, qué complejos tienen, qué les preocupa que piensen los demás, qué no les gusta de sí mismas… Y que, después, se imaginaran en un lugar maravilloso en el que todas esas cosas ya no les afectan. ¿Cómo vestirían en ese mundo?

-¿Cómo definirías tu propio estilo?

-Es una mezcla de varios: natural, romántico y creativo. Juego con ellos usando diferentes proporciones de cada uno según me sienta cada día. Algo que me ha traído mucho bienestar y la capacidad de disfrutar más con la ropa ha sido que lo de fuera sea coherente con lo de dentro y exprese quién soy.

-¿Te gustaría pasarte al mundo del estilismo o algo parecido?

-Me encanta el tema de la creatividad en el mundo de la moda y me entusiasma verla en todo su esplendor en editoriales y pasarelas. Sin embargo, conociéndome, creo que no podría dedicarme sólo a eso. Sé que acabaría sintiendo cierto vacío dedicando mi trabajo únicamente a la imagen y a todo el mundo que la rodea.

-¿Qué proyectos tienes de futuro?

-¡Muchos! Ahora mismo estoy creando un segundo curso 'online' más centrado en la creatividad que será como una segunda parte del curso 'Tu armario tiene algo que contarte'. También tengo diseñados dos modelos más de collar con un significado detrás muy chulo que en breve verán la luz. El primero y más importante está inspirado en mi experiencia con la muerte gestacional. Además, estoy redactando un proyecto para presentar al Ayuntamiento de Santander. El tema de diseñar algo de ropa también está ahí, pero es algo mucho más a largo plazo.

-¿Cómo compaginas tu trabajo con ser madre?

-Como puedo. Es algo que me sigue resultando difícil porque me gustaría poder dedicarle más tiempo. Por las mañanas mientras están en el cole y los lunes por la tarde son enteritos para mí. Luego se complica con el tema extraescolares, deberes, dedicarles tiempo de juego y conexión, coladas, meriendas, cenas… Así que aprovecho el fin de semana algún rato por la mañana mientras duermen, las noches y cualquier rato que veo posible avanzar un poco.