Javier de Hoyos, la sonrisa de la tele, es de Santander

No puede evitar sonreír, incluso con la mirada. Y así conquista a las cámaras y en las distancias cortas. Javier de Hoyos (Santander, 1990) es una de esas caras jóvenes que se abren paso en televisión. En su caso, no sin esfuerzo, probando en diferentes formatos y luchando por conseguir su sueño: presentar su propio programa algún día. Mientras tanto, en la actualidad es subdirector y aparece como redactor en pantalla en el espacio de corazón 'Socialité' de Telecinco, con María Patiño al frente. Una labor que compagina con su presencia en redes sociales, especialmente en YouTube, donde tiene un canal en el vuelca todos los 'salseos' del momento con su particular sentido del humor y suma ya casi 73.000 seguidores.

Ha sido modelo, etapa en la que le costaba quedarse callado, gajes de la vocación, incluso actor de la serie juvenil 'Yo Quisiera'. Pasó mucho tiempo persiguiendo a rostros populares en el portal de información televisiva Fórmula TV, pero él quería hablar cara a cara con la cámara y los espectadores. En sus inicios lo hizo en informativos, después llegó a ser chico de redes sociales en el programa político 'El Cascabel' y siempre mantenía esa esencia propia que traspasa las pantallas.

Su agenda no le permite escaparse mucho a casa, pero es un chico muy familiar, como demuestra en redes sociales, donde tiene un papel fundamental su madre, 'mamanona' como se refiere a ella cariñosamente. Ella, su padre y su hermana no quisieron perderse su puesta de largo como maestro de ceremonias en Cantabria hace unos días en los Premios Cantabria Digital que otorgaba El Diario Montañés. Tomaba el relevo a otro compañero, incluso de productora y también cántabro, Germán González, y vivía con nervios la responsabilidad de estrenarse en un evento en su tierra. Antes de iniciar la gala, en Cantabria DModa tuvimos ocasión de sentarnos con el comunicador y saber más de todas sus facetas. Esas que comparte con buenas amigas como Leticia Sabater, quien hizo un guiño en la propia entrega de premios.

La pasión por una profesión y un medio como el televisivo define a este joven cántabro, muy amigo de sus amigos, felizmente enamorado y con ayuda estilística en casa, lo cual agradece en ocasiones así, y con unos cómplices a los que llena de buenas palabras, sus perros Leo y Siro. Conocer a Javier de Hoyos es descubrir a una persona entrañable, que fija sus ojos sinceros y habla hasta el infinito. Un profesional único con mucho aún por decir en un panorama, el televisivo, que necesita refrescar nombres y sonrisas. Y si es de Santander, mejor que mejor. ¡Suerte!