Así pasan la cuarentena Natalia San José, Nira y Bosco

-Soy licenciada en Publicidad, Relaciones Públicas y Marketing con especialización en Marketing de Moda. Además, entre los años 2015 y 2017 viví en Londres, donde tuve la oportunidad de hacer un curso de diseño de moda en el Longon College of Fashion. Empecé en el mundo de los blogs de moda en el año 2012 y seguidamente surgió el 'boom' de Instagram, desde entonces colaboro con muchas marcas y comercios de la región, así como marcas nacionales e internacionales. Desde que comencé mi andadura, mis animales siempre han sido también protagonistas de mis publicaciones.

-Ahora que te conocemos un poquito mejor, preséntanos a tus dos compañeros de piso de cuatro patas y cuéntanos cómo llegaron a tu vida.

-Nira, mi chihuahua y la niña de mis ojos, lleva conmigo desde el otoño del año 2010. Siempre había querido tener un chihuahua y al verla fue amor a primera vista. Tuve un sentimiento especial nada más verla y no me equivoqué, hacemos un buen equipo y nos entendemos muy bien. Dicen que los chihuahuas son complicados, pero no tengo esa sensación con Nira. Por otra parte está Bosco, mi gato negro, llegó a mi vida en el otoño de 2014, le adopté, ya que había nacido en una camada callejera y su destino estaba un poco en el aire. Me río mucho con él y, a pesar de ser un gato, le noto ciertas costumbres un poco perrunas porque se ha criado con Nira y con Curro, un galgo español que vive con mi padre. Siempre tuve claro que si algún día tenía un gato, iba a ser un gato negro, ya que por desgracia son los gatos que menos salen en adopción porque nadie los quiere.

-Confiésanos, ¿haces pruebas de tus creaciones a Nira, alguna horquilla, tal vez? o ¿te sirve de inspiración?

-Alguna vez le pruebo alguna de las diademas y me río mucho con su reacción y cómo me mira. Desde pequeña ha sido siempre muy reacia a llevar ropa. Siempre que he intentado ponerle algo me ha dejado muy claro que por ahí ella no pasaba, así que no la fuerzo y la dejo al natural. Además, no la gustan mucho las fotos, cada vez que saco el teléfono o la cámara se va o empieza a mirar para otro lado y resulta complicado hacerle una en condiciones.

-¿Qué te aportan tus mascotas que ninguna persona puede aportarte?

-Un cariño diario incondicional. Los que tengan mascotas saben a qué me refiero. Nira es muy cariñosa y el 95% del tiempo estamos juntas (incluso me la llevo a la oficina conmigo). Yo vivo sola por lo que estar con ellos, sobre todo en esta cuarentena, me hace los días más entretenidos. Por su lado, Bosco es muy independiente, pero también tiene su vena cariñosa, es como el hermano pequeño juguetón que hace que siempre tengas que estar alerta por si está haciendo algo que no debe, pero cuando se acerca ronroneando y pidiendo mimos, se me olvida todo lo travieso que es.

-¿Cómo es la convivencia de un perro y un gato, tú que lo vives en primera persona?

-Me río muchísimo con los dos. Nira tiene una 'personalidad' un poco de diva, y la gusta ser el centro de atención por lo que si ve que hago mucho caso a Bosco, se hace notar ladrando o metiéndose entre ambos. Se llevan muy bien, pero la que manda es Nira. A Bosco le gusta mucho jugar con ella aunque Nira no siempre esté por la labor.

-Cuéntanos la anécdota con ellos que más te haya hecho reír.

-Casi cada día se ponen a jugar y se persiguen por todo el piso. Me río muchísimo y podría pasarme el día entero viéndoles jugar. Nira ladrándole mientras corre detrás de él y Bosco mostrando su lado más felino, saltando, escondiéndose… Es imposible aburrirse con ellos. A Bosco le encanta asustar a Nira mientras duerme o está despistada, y da igual las veces que le vea hacerlo, siempre me río muchísimo con lo travieso que es.

-Para Bosco, la crisis del Covid- 19 no habrá supuesto ningún cambio, pero ¿cómo lleva la cuarentena Nira? ¿Tene algún amigo perruno que esté deseando volver a ver?

-Al principio Bosco me perseguía por toda la casa y me observaba como diciendo, ¿por qué estás tanto tiempo aquí? Ahora ya se ha acostumbrado y le está viniendo bien para socializar más e interactuar más tanto con Nira como conmigo.

Nira está acostumbrada a estar todo el día por ahí conmigo, como he dicho antes incluso me la llevo la oficina donde tiene su propia silla. Está acostumbrada a estar mucho en la calle por lo que ahora cada vez que vamos a pasear se pone muy contenta.

En situación normal, pasamos bastante tiempo en casa de mi padre, donde está Curro, el galgo que también podéis ver en mis redes. Le estoy echando mucho de menos, y ¡seguro que Nira también!

-No crees que el estar obligados a permanecer en casa durante todo este tiempo nos está haciendo ver lo afortunados que somos todos aquellos que tenemos animales de compañía? ¿Haces algo especial con ellos durante estos días?

-Siempre me he sentido afortunada por lo que me aportan mis animales pero ahora me doy incluso más cuenta. Como comentaba antes, yo vivo sola, y tenerles a ellos me hace los días más amenos, tanto por la compañía que hacen como por las obligaciones que supone tener un animal y que, por su puesto, hay que cumplir.

Ahora tengo más tiempo para poder jugar y disfrutar de ellos y eso me reconforma tanto a mí como a ellos.

-Ahora que estamos más cerca de volver a la calle, a nuestros trabajos y a ver a los nuestros de nuevo, ¿qué piensas hacer en primer lugar cuando cese el estado de alarma?

-Abrazar a mi familia y amigos es lo primero de la lista, y lo segundo es dar un largo paseo por la playa con Nira y Curro.

Un día más es un día menos y estoy deseando volver a la normalidad, aunque también echaré de menos muchos ratos que he pasado tanto con Bosco y Nira y que en una situación normal no habría podido pasar. Pronto saldremos de esta, ¡mucho ánimo a todos!