«En redes no sigo las tendencias, la moda pasa y el estilo es lo que permanece»

-¿Cómo empezó todo?

-Yo soy economista y terminé trabajando en un banco. Pero en feberero de 2022 empecé con una trombosis en el brazo por la que me tuvieron que ingresar, y desde estonces ha sido un infierno de problemas médicos graves. Iba todas las semanas al hospital sin descanso y pasé, de no pisar mi casa por estar todo el día trabajando, a de repente verme en el hospital sin poder trabajar. Es más, si me movía podía desplazarse el trombo (localizado en una vena principal) y morirme. Y luego todo ha ido a peor. No entendíamos la explicación. Lo normal es que sea por un tumor en la cabeza y me lo estuvieron buscando por todo el cuerpo yendo tres veces por semana al médico.

-¿Y qué pasó después?

-Me dijeron que no iba a poder recuperar mi brazo. Después, por unos problemas similares en la pierna, estuve tres meses sentada sin poder moverme. Cuando llegó diciembre no podía más y mi marido me vio tan desesperada que me dijo que por qué no me creaba un perfil en redes para distraermen.

-¿Por qué ese perfil enfocarlo en moda?

-Trabajé en moda hace años, en las oficinas centrales de Mango en Barcelona. Siempre me ha gustado, aunque yo me pongo lo que me apetece y me gusta, a mi bola. Mis compañeras de trabajo siempre me preguntaban por lo que llevaba puesto, incluso en Nueva York me paraban por la calle para preguntar dónde me había comprado la ropa. Pero yo no seguía a ningún influencer en Instagram. Es más, no sabía usar la aplicación, tampoco Pinterest, ni si quiera sabía cambiar la contraseña del móvil. Y un día me senté y me cree el perfil. Me sentía como el que tiene una muñeca y le va poniendo vestidos, pues así pero con las fotos que publicaba.

-¿Y por qué nombró la cuenta como The Fashion Corner by N?

-Pensé, tiene que ser un nombre que te suene a moda. Y se me ocurrió Fashion Corner, pero ya estaba cogido, así que puse la N de Natalia, si total no se lo iba a decir a nadie.

-¿Cómo que no se lo dijo a nadie?

-Cuando me creé la cuenta no se lo dije ni a mi familia. Al cabo de una semana, cuando vi que me estaba quedando muy monas las publicaciones, decidí contárselo.

-¿Cómo fueron aquellas primeras publicaciones?

-Cuando empecé a publicar tenía una idea en mi cabeza, que era plasmar mi estilo a través de las fotos. Quería que fueran imágenes en las que yo me reconociera, porque como no tenía pensado contárselo a nadie, no pensaba en lo que le iba a gustar a la gente. Era algo para mí en lo que pudiera reconocerme a través de las fotos de otra. Porque yo no salgo en las publicaciones, ese no era mi objetivo. Me gusta lo bonito y el buen gusto, por lo que mis fotos tenían que estar bien hechas, entonces empecé a poner imágenes hechas por fotógrafos de moda, que admiro su trabajo.

- ¿Su perfil es anónimo?

-Al principio no salía en el perfil. Después publiqué un 'storie' mío y todo el mundo me empezó a contestar «que mona eres». Y dije ¿por qué no? Desde entonces subo mis looks solo a los 'stories', las publicaciones siguen en la misma línea y nunca salgo.

-En tan solo nueve meses ha logrado más de 122.000 seguidores. ¿Cómo se gestiona esa presencia e influencia en las redes?

-Cuando llevaba varias publicaciones, y me gustaba como estaba quedando, me promocioné en mi perfil personal para que lo viera mi entorno cercano, y mucha gente me empezó a seguir. Y yo seguí haciendo mis cositas, y en enero, con tan solo 800 seguidores, ví que me había seguido Tamará Falcó. No me lo esperaba. Fui improvisando y de repente me vi creciendo a mil y pico seguidores diarios, yo flipaba. Incluso me empezó a escribir muchísima gente como una estilista de Miami. Pero yo no esperaba nada y me he encontrado con todo esto y me he ido adaptando por el camino.

-¿Se marca un horario?

-Cuando empecé a crecer a ese nivel pensé en seguir un horario. Publicaba por las mañanas cuando me cuadraba y empecé a estudiar el algoritmo, que me encanta porque está muy relacionado con mi trabajo. Y se lo conté a una amiga en Barcelona que las dos estábamos pasando por un mal momento, porque fallecío su madre. Y a partir de ahí empezamos a ver que había mogollón de perfiles que crecían mucho y no aportaban nada. ¿Cómo puede ser que perfiles que viven de copiar a otros crezcan tanto? Y llegamos a la conclusión de que era el algoritmo de Instagram.

-¿Alguna vez pensó en abandonar la cuenta?

-Sí. Pero si no lo he hecho ha sido por el algoritmo que es lo que me interesa y me enganchó. Es lo que me une con mi verdadero trabajo.

-¿Cómo se mantiene al tanto de las tendecias y en qué se inspira?

-En lo que yo me pongo. Quiero decir, si que es cierto que tienes que saber lo que se lleva, que eso antes me resbalaba. Pero si miras a ver cuáles son las tendencias hay cosas que no publico porque no me gustan. Incluso subo prendas que no se llevan pero es lo que a mi me gusta. Si no me lo pondría y no lo pongo. Y si la estética de la foto no me gusta, tampoco la publico.

-¿Dónde busca las fotografias?

-Normalmente en Pinterest o algún perfil de Instagram.

-¿Qué imágenes triunfan más?

-Las que más han funcionado son en las que aparece lo que yo me pongo. Por ejemplo, he hecho este verano una de faldas largas que ha arrasado, porque es lo que yo me pongo desde los 14 años. No es algo que se lleve especialmente, pero a mí me excita. Y ahora me parece que va por 7.000 'me gustas' y es de hace 15 días.

-¿Colabora con alguna marca?

-Siempre que sea fiel a mis principios y las pongo por 'stories'. El 99% de las veces son marcas españolas con producto hecho en España, que es en lo que yo creo. He llegado a rechazar algunas ofertas que sentía que engañaba a mis seguidores o no me representaban.

-El texto de las publicaciones lo escribe en español e inglés. ¿Por qué?

-Al principio mis seguidoras eran todas extranjeras y ponían todo en inglés. Luego empecé a ponerlo también en español porque quería llegar al público de aquí.

-¿Y actualmente de dónde son sus seguidores?

-En las estadísticas de la aplicación sale España, Estados Unidos, Corea del Sur... De todas partes. Y la edad de 25 a 45 años, sobre todo mujeres con un estilo femenino.

-¿Se consideras influencer?

-No, yo soy creadora de contenido.

-¿En qué se diferencia su perfil del resto?

-Cuentas como la mía hay millones y a patadas. La clave del éxito está en seguir mi estilo, plasmar mi personalidad y no convertir esto en una carrera de seguidores. Mi objetivo es tener un crecimiento con unos seguidores implicados, vinculados e identificados y ver si realmente consigo que el mensaje que yo quiero dar se traspasa. La moda pasa y el estilo es lo que permanece.

-¿Alguna vez ha recibido críticas?

- Solo dos y de gente de Santander.

-¿Por qué cree que es?

-Envidia, no tengo ninguna duda. Pero mi perfil es todo lo contrario, se ha creado una comunidad muy guay, que es lo que yo quería.

-¿Cómo es la interacción con sus seguidores?

-Respondo a todos. Me llegan muchísimos mensajes al día y siempre les contesto y respondo a los comentarios.

-¿Planes de futuro?

-Lo que hago siempre es tener claro que yo esto lo he hecho para ser fiel a mí misma. Entonces lo que no quiero es quitar esa idea de mi cabeza y tenerla clara. Cuando vas creciendo es fácil perder el norte y lo que tengo claro es que no quiero perder mi esencia o por lo que yo he hecho todo esto y lo que me ha motivado a seguir.