El santanderino Alejandro Albalá cumple «su sueño» y se lanza del helicóptero de 'Supervivientes'

El cántabro vivirá, al menos de primeras, en la 'Isla del Pirata Morgan', ubicada en Cayo Paloma, junto a los otros siete participantes más votados: Melyssa Pinto, Lola Mencía, Tom Brusse, Omar Sánchez, Gianmarco Onestini, Olga Moreno y Marta López. El resto sufrirá la aventura más extrema en un barco encallado. En plató su madre, Paz Guerra, asegura que se sentía «súper contenta y emocionada de ver a mi hijo cumpliendo su sueño. Por fin se tiraba del helicóptero». Él no ocultó la emoción del momento y tuvo mucha complicidad con Jorge Javier Vázquez, presentador en Madrid.

«Te permito lo que quieras», decía al presentador y justo después le confesaba «mira que me he puesto nervioso mil veces, pero es que hoy es un momento tan excitante y gratificante». Vázquez, fiel a su ironía, preguntaba, «¿qué pone más nervioso tirarse desde el helicóptero o entrar en Cantora?». «A mí entrar en Cantora me parece deporte de riesgo», aseguraba el exmarido de Isabel Pantoja hija. Fue entonces cuando se dispuso a saltar, muy espídico, no sin antes tener unas palabras para sus seres queridos. «Quiero dedicar el salto a mi familia, a mi perrita Gala, que la amo con locura, y ahora que estoy tan cerca del cielo a mis tres abuelos que seguro estarán sonriendo… Un besito mamá, Marta, Dani… ¡Nos vemos!», dijo emocionado. Envalentonado se lanzó limpiamente y comenzó su viaje 'reality'.

En su vídeo de presentación remarcó que «la aventura de 'Supervivientes' es un reto que llevaba persiguiendo hace tiempo». Es más, hace algunas ediciones estaba confirmado y, finalmente, en el último momento se cayó del 'casting'. Aprovechó para quejarse de que «te etiquetan como pareja de, exnovio de, exmarido de...». Y es que Alejandro ya pasó por Honduras antes, pero como visitantes de quienes fueran sus parejas. «Fui a ver a Sofía, pasamos una noche en Cayo Paloma y lo dejamos por el lío que tuvo con un chico allí. Fui con Isa que se iba a casar con Alberto Isla... Siempre he venido a visitar a alguien. Me toca a mí solo, se acabó la broma, llegó mi momento», repitió.

En esta primera gala el cántabro se mostró cercano y activo. «¡Le vi genial! Con fuerza y muy vital. Transmite muchas ganas de participación y demuestra ser un gran compañero», nos confiesa su madre. La podóloga aprovecha la ocasión para «agradecer de corazón a toda la audiencia que nos ha apoyado y a ese 'Team Albalá' que se ha formado. Sé que Santander se ha volcado en él. Es muy bonito sentir el calor de tus vecinos», asegura. En plató mostró a Jorge Javier las ganas de su hijo, «va encantado, feliz, fuerte. Le veo muy bien». El catalán, que cumplía diez ediciones consecutivas al frente del formato, mientras Lara Álvarez siete, intentó crear tensión con el clan Pantoja. «¿Alejandro Albalá se puede hablar con Omar, el novio de Anabel Pantoja?», preguntaba. «Yo creo que sí, perfectamente. Muy bien, además», respondía la madre. La 'influencer' explicaba que «le he puesto un poco en conocimiento porque había gente que él no ubicaba». La joven recalcó que «con Paz Guerra no me llevo porque no la conozco, que tenga mucha suerte su hijo».

El cántabro lo dio todo en el primer juego de recompensa, en el que debía pasar por un circuito de barro y obstáculos para lograr aumentar su peso y lograr premios para su equipo. «¡Qué equilibrio tiene Albalá!», recalcaba Jorge Javier. Lo hizo tan bien que consiguió hasta un extra para él y aumentó de 71,1 a 78,8 kilos. Finalmente, el grupo casi duplicó en puntos a los encallados y se hicieron con un kit de pesca, gafas, machete, olla con tapa, cuerda, lona y latas. La noche tenía otro momento icónico pendiente: la llegada a la 'palapa'. «El fantasma del futuro que más se ha hecho esperar», decía de él Lara Álvarez. La asturiana, siempre espléndida, le comunicaba que su recompensa individual consistía en una esterilla 'premium' y una lata.

Los concursantes no se libraron de las nominaciones ni a su llegada a la isla. La más beneficiada fue Melyssa, cuyo salto fue el mejor para la audiencia, convirtiendo así a la joven en la primera líder e inmune en las nominaciones. Albalá confesó que «iba a nominar a Gianmarco, pero al final no, porque se ha portado muy bien conmigo». Optó por Lola Mencía«por descarte, por afinidad». La exnovia de Diego Pérez Asón, que al lanzarse del helicóptero se acordó, cómo no, de su perro Horus, era una de las señaladas finales junto a Tom, Gianmarco y Olga, nombre que incluyó en la lista de nominados la líder por ser «la persona con la que he tenido menos convivencia». El cántabro no recibió ningún punto.

Sabemos que Albalá ha metido en su maleta tres bañadores de colores llamativos (con flamencos, palmeras y tucanes), aunque para el salto optó por los cohetes, a modo simbólico, «es mi momento de despegar y llegar hasta el infinito y más allá», aseguraba en las redes. También incluía varias camisetas básicas y ropa impermeable. Como objeto personal, Alejandro se ha llevado el oso de peluche que le regalaron su madre y su hermana la vez anterior que no pudo ir al 'reality'. Espera que le dé mucha suerte y sea un gran compañero, quién sabe si mejor que alguno de sus compañeros. Lo veremos en Telecinco, que se frota ya las manos con llegada del programa. Anoche reunía a 2.802.000 espectadores y 30,4% de share, datos que esperan se mantengan en las emisiones de los domingos con Jordi González y los martes con Carlos Sobera como presentadores. Y en la memoria de toda Cantabria la victoria de Jorge Pérez, ¿se repetirá la historia?