La santoñesa Ainara de Santamaría vive en Venezuela la emoción final de Miss Grand International

No es la primera vez que con su 1.79 centímetros pasea una banda y sabe la responsabilidad que supone, pero quiere dar un mensaje optimista, «si luchas por algo con constancia puedes conseguirlo. Los sueños hay que protegerlos». El suyo sería lograr esta preciada corona, una obra de arte a estrenar y firmada por George Wittels, uno de los orfebres más prestigiosos del mundo.

El próximo día 25 de octubre será la fecha clave con la gala final del certamen en el Poliedro de Caracas, pero antes tiene una vertiginosa rutina de pruebas y compromisos hasta que se conozca a la sucesora de la paraguaya Clara Sosa. La santoñesa sabe que no será fácil, «todas las compañeras son increíbles, no tengo ningún pero», señala. Cuenta que su acento ha causado «mucha gracia» y la 'culpa' la tienen series como 'Élite', 'Vis a Vis' o 'La Casa de Papel', todo un auténtico fenómeno internacional. «Gracias a Netflix y Rosalía estamos de moda», explica la guapa oficial.

No puede evitar acordarse de su familia y amigos, sin olvidar a «toda la gente que se ha volcado conmigo en redes sociales. ¡Gracias por tanto cariño!». De hecho, las votaciones populares están abiertas y pueden ser un pasaporte a los 'tops' finales de la competición. También destaca que la organización nacional de Miss Grand se ha volcado con ella, «me han dado su total apoyo desde el minuto cero».

La miss está expectante por la puesta de largo de todas las candidatas ante la audiencia televisiva que vivirá estos próximos días toda la evolución del concurso, también los eventos, totalmente gratuitos para el pueblo venezolano. Y, de memoria, desgrana los días que tiene por delante, como la cena de bienvenida, en la que lucirá un diseño de Alejandro Fajardo, uno de los modistos expertos en el universo de belleza. Aunque en su maleta también ha incluido creaciones cántabras, como varios diseños de Carlo Vega, tal y como ha compartido ya en sus redes oficiales.

Sabe que la competencia en traje de baño «será crucial, las chicas están muy preparadas y habrá que dar el máximo», comenta. No en vano ha contado con el asesoramiento de expertos como los hermanos Julio y Jorge Matamoros o Giselle Reyes, 'missólogos' que aconsejaron a la cántabra a comportarse en cada situación o sobre la propia pasarela.

Otro de los momentos estrella será defender el traje típico que, en su caso, tendrá mucha historia. Y es que la artista malagueña Cristina Marín ha diseñado para ella un vestido inspirado en el Guernica. «Aprovechando que el lema de la organización es 'Frenemos las guerras y la violencia' queríamos algo que recordara la historia de España y tuviera una dimensión internacional», explica Ainara de Santamaría.

Reconoce que no teme la entrevista con el jurado, en la que deberá enfrentarse a preguntas de todo tipo en español e inglés. Es más, sólo puede pensar en llegar al «broche final», la esperada gala que, de ganar, «me cambiaría la vida. Directamente cogería un avión dirección Tailandia para vivir durante un año y ser la embajadora de Miss Grand International. Eso sí, no me olvidaría nunca de Cantabria».