Jesús Castanedo: «La brecha digital arrincona a los vulnerables»

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El director técnico de la Cocina Económica es consciente de la necesidad de estar al día con las nuevas tecnologías, ayuda a los más necesitados a usar estas herramientas

Mariana Cores

Santander

Martes, 19 de enero 2021 | Actualizado 22/01/2021 11:53h.

Hace más de 20 años que Jesús Castanedo (Santander, 1958) se dedica profesionalmente a la labor social. Desde hace más de un año está al frente de la Cocina Económica como director técnico. Han sido meses «muy complicados», pero la pandemia no le ha impedido seguir con su hoja de ruta y trabajar para actualizar el engranaje de funcionamiento de la institución. Entre sus objetivos, atajar la brecha digital de los más desfavorecidos, gracias a la ayuda de la Fundación 'la Caixa' y CaixaBank.

-¿La Cocina Económica es más que un comedor social?

-Desde que las Hijas de la Caridad llegaron a Santander en 1908 siempre han estado abiertas a todo tipo de necesidades de las personas más vulnerables. Además de disponer del comedor social desde el principio, hace 25 años se crearon los talleres ocupacionales de cartonaje, encuadernación, alpargatas y textil que buscan que las personas puedan romper, mediante la formación, el empleo y el acompañamiento sociolaboral, las cadenas de la exclusión social y laboral. Otra preocupación a la que estamos dando respuesta es el problema de las personas sin hogar. Actualmente, con la residencia y los dieciséis pisos repartidos por Santander, estamos posibilitando que más de 60 personas hayan dejado la calle y tengan un alojamiento digno. Y ahora, y con el apoyo de Fundación 'la Caixa', abordamos un nuevo ámbito de la pobreza que esta pandemia ha puesto en el candelero: la brecha y la pobreza digital.

-¿Cómo se manifiesta esta brecha digital?

-Esta pandemia ha puesto de manifiesto que la carencia de medios y la falta de formación en el área digital deja fuera y arrinconadas a las personas más vulnerables. Un ejemplo es el de las personas que no han podido seguir los estudios por carecer de ordenadores y de conectividad o las que no han podido realizar trámites administrativos por carecer de conocimientos, incluso en el manejo del teléfono móvil. Sentimos la gran brecha que hay entre los que saben y tienen y las personas que se encuentran al margen del conocimiento y de los medios digitales.

-¿Cuáles son los objetivos del programa de digitalización de la Cocina Económica?

-Es un programa transversal, que junto con la igualdad y la perspectiva de género, queremos que impregne el trabajo que se realiza en favor de la inclusión social de las personas más desfavorecidas. Queremos alinearnos con los grandes objetivos de recuperación que apuestan por una España verde, digital, sin brechas de género y cohesionada y con este programa nos implicamos e implicamos a las personas que participan de nuestros servicios en hacer un mundo mejor y más sostenible.

-¿Cómo canalizan la ayuda de la Fundación 'la Caixa' y CaixaBank para romper esta brecha digital?

-Existen dos puntos básicos: tener los medios y tener conocimiento. En estos momentos, con la ayuda de Fundación 'la Caixa' hemos creado el aula de informática que nos va a permitir desarrollar programas de aprendizaje para las personas que acuden a la Cocina Económica. Sin estos medios hubiese sido imposible abordar la brecha digital. Estamos muy agradecidos a CaixaBank, que a través del presupuesto de Fundación 'la Caixa', nos ha dado un gran impulso para poder lograr nuestros objetivos.

-¿Cuáles son las prioridades en ese aprendizaje?

-Partimos de cero. Empiezan aprendiendo a manejar el móvil y todas las posibilidades que nos da. Acceden también al ordenador. Las posibilidades que les abre la era digital son inmensas, desde poder conectarnos con los suyos en tiempo real a tener un correo digital, poder acceder a las redes sociales, realizar trámites administrativos, etc. Se trata de una plataforma para reforzar y adquirir aprendizajes, en todas las áreas del conocimiento. También es una magnífica herramienta para poder acceder al empleo. Estos talleres pueden convertirse en empresas de inserción. Poder potenciar la venta 'on line' va a posibilitar la capacidad de crear más puestos de trabajo.

-Ha mencionado que el covid ha empeorado la situación de esta población vulnerable. ¿Cómo han reaccionado ustedes?

-La pandemia nos ha obligado a centrarnos en las acciones que son esenciales: que las 200 personas que vienen al comedor cada día tengan una comida digna, que las 25 personas que están en la calle y viene a ducharse y lavar la ropa estén bien atendidas, que las 150 familias que cada semana pasan a recoger alimentos puedan mejorar su situación y que las 60 personas que han salido de la calle y están en nuestros servicios habitacionales, puedan continuar sus procesos de inclusión social. Queremos que todas estas personas puedan iniciar procesos que les permitan su recuperación personal y su integración social y laboral, para lo que este programa de digitalización es una de las mejores herramientas con las que contamos.

-¿Qué retos se plantean?

-Nuestro propósito es dar un servicio de calidad a las personas más vulnerables de Santander y Cantabria. Estamos inmersos desde hace unos años en la digitalización de la Cocina Económica para dar un servicio eficaz y eficiente. El control de los servicios y el seguimiento puntual de las personas nos ayuda a ser más eficientes, a conocer mejor las situaciones individuales y a dar respuestas eficaces.