«Es necesario implantar un método para la resolución de conflictos entre escolares»

Beatriz Cuerno es mediadora de Amecan, miembro del proyecto de mediación intrajudicial de los Juzgados de Santander y formadora del programa Alumnado Ayudando Alumnado (AYA), para atender casos de acoso escolar en los centros de estudio de la región. María Luisa Barquín es vicepresidenta de la Junta Directiva de la Asociación de Mediación de Cantabria e, igualmente, mediadora de Amecan e integrante del proyecto de mediación intrajudicial de los Juzgados de Santander y formadora del programa AYA.

-¿Qué proyectos de Amecan se desarrollan con el apoyo de la Caixa?

-El programa Alumnado Ayudando Alumnado (AYA), para detectar y abordar los casos de acoso escolar, se está desarrollando en diversos centros escolares de Cantabria gracias al apoyo y la financiación de la Caixa. En segundo lugar, Amecan es una entidad que forma parte del programa Caixa Proinfancia en Santander, prestando atención psicoterapéutica a familias con menores entre cero y 18 años que viven en contextos de pobreza.

-¿Cuál es el balance y qué resultado destacarían?

-El programa AYA que se lleva a cabo en este año 2023 en el IES Marqués de Manzanedo en Santoña destaca por la implicación del profesorado en la mejora de la convivencia en el centro. Durante la sensibilización realizada a todo el alumnado hemos detectado muchas necesidades de intervención y de distinta índole. También el interés de los padres y madres que asistieron a la sesión dirigida a AMPA, los cuales consideraban necesario y acertado el programa. La voluntariedad de querer formar parte del equipo AYA por parte de un grupo considerable de alumnado, una vez recibida los talleres de sensibilización, ha sido muy positivo. La estimación era de un máximo de 10 personas, superando la cifra hasta 16 alumnos y alumnas que participan con equipo AYA.

Los chicos y chicas ayudantes seleccionados, que recibieron formación concreta en habilidades sociales y herramientas para la gestión de conflictos, han valorado de manera satisfactoria la formación recibida, se han implicado, se han sentido parte de un grupo y han declarado que desean recibir más talleres en este sentido. Todo ello nos lleva a sentirnos satisfechos por conseguir un clima de cohesión e integración, así como implantar un método de resolución de conflictos entre iguales.

-¿Han detectado a las familias cántabras ajenas al problema del acoso escolar?

-Quizás más que ajena, sería necesaria la concienciación y empatía en el sentido de que no es un tema de otros. Nuestros hijos se pueden ver afectados tanto como receptores de las situaciones de acoso como ser los que lo infringen. Contar con una información más profunda y esa empatía de la que hablamos. Trabajamos con la comunidad educativa para que no pasen de largo ante la problemática.

-¿Qué otros problemas de convivencia se dan en los centros escolares?

-Hemos detectado situaciones de pertenencia al grupo, aislamiento, rechazo, absentismo, problemas personales, errores de comunicación sobre el lenguaje y las palabras empleadas para dirigirnos a las otras personas e insolidaridad. Todas estas situaciones las atienden los alumnos y alumnas ayudantes del programa.

-¿En qué consiste la intervención en estos casos?

-A modo de ejemplo, en los centros en los que intervenimos se trabaja con el alumnado, profesorado y las familias. Con el alumnado realizamos talleres de sensibilización y, posteriormente, formación, a los alumnos y alumnas previamente seleccionados, en la práctica de la ayuda, con talleres en los que se realizan dinámicas y actividades para trabajar los contenidos: acompañamiento, apoyo, comunicación y resolución pacífica de los conflictos. Todo ello les permite afrontar la tarea de la ayuda en sus distintas fases y ponerla en práctica con los grupos de alumnos ayudantes. Se trata de desarrollar en los participantes la capacidad de ayudar y ser ayudado como una herramienta fundamental de la convivencia.

-¿Cuáles son los pilares sobre los que se asienta Amecan?

-El pilar fundamental es trabajar la mediación con profesionalidad para alcanzar la excelencia. No queremos quedarnos a medias. Estamos totalmente implicados en divulgar la cultura de paz como la forma de resolución de conflictos. Trabajamos para poner en valor la mediación entendida como encuentro, el valor de la persona, el respeto, la tolerancia, la cooperación, la solidaridad y la empatía. Otro de los pilares es la formación continua y la oportunidad de participar en programas que de otra manera no sería posible.

-¿Qué es lo más satisfactorio del trabajo del mediador?

-Es muy gratificante el sentimiento de formar parte de un equipo de trabajo en el que estamos unidos por unos mismos valores y en un mismo camino, con la diversidad de origen de cada uno. El trabajo en equipo es muy importante y sentimos mucha cercanía. Además, el contacto con las personas con las que intervenimos en los distintos ámbitos del proceso de la mediación (el campo educativo y otros servicios de mediación). Por último, destacar que el contacto con las personas destinatarias de nuestra labor y la cercanía que se establece es un eje fundamental de nuestra labor.

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