«Cada vez se detecta más pérdida de memoria en menores de 65 años»

Andrea Gallardo (Santander, 1986) forma parte del equipo de profesionales de la Asociación de Familiares de Alzheimer desde el pasado mes de julio, cuando llegó para cubrir una baja por maternidad. Aunque no son muchos, estos meses «me están dando la oportunidad excelente para mejorar y ampliar mi curriculum, obtener conocimiento sobre el campo de las demencias y desarrollarme profesionalmente en el ámbito de trabajo social». Ahora está inmersa en el desarrollo del programa de envejecimiento activo saludable en entornos rurales 'Detección precoz de demencias en el medio rural', financiado por la Fundación 'la Caixa'.

–¿Cuándo empezaron, y cómo, con este programa?

–En 2022, desde AFAC se seleccionaron dos localizaciones de los municipios de Cantabria en riesgo de despoblamiento: Selaya y Santiurde de Toranzo. Para este año 2023 se pretende realizar una réplica del proyecto con mayor impacto social, seleccionando tres localizaciones de diferentes municipios de la región, donde no existen servicios públicos que intervengan actualmente de manera especializada en la detección precoz de demencias e intervención a través del entrenamiento cognitivo.

–Uno de los objetivos es mejorar la calidad de vida de las personas mayores en municipios en riesgo de despoblación. ¿Se dan más casos de alzhéimer en estas zonas?

–Por lo general, los entornos rurales tienen un perfil demográfico envejecido. Como dato, apuntar que hay más participación de mujeres en este tipo de proyectos, con una edad media de 65 años con quejas y fallos de memoria, con necesidad de atención e intervención en la detección precoz de demencias y la prevención del deterioro cognitivo leve. El problema es que cada vez se detecta más pérdida de memoria entre gente con menos de 65 años. Una de nuestras hipótesis radica en la detección tardía de los casos de demencias y deterioro cognitivo, lo que dificulta en su mayoría la independencia en las actividades de la vida diaria (AVD), causando gran dependencia.

–¿Sobre qué población actúan?

–El perfil de las personas beneficiarias del proyecto es de personas mayores de 65 años, con problemas de memoria asociados a la edad o menores de 65 años con problemas o quejas de memoria benignos. También se incluyen a personas de la tercera edad, en general, con quejas de pérdida de memoria sin deterioro cognitivo o con deterioro cognitivo leve, pero sin diagnóstico de demencia confirmado. Además, está dirigido a mujeres mayores de 55 años, mujeres cuidadoras o excuidadoras de personas dependientes o con discapacidad.

–¿Qué tipo de actividades realizan con estas personas?

–Realizamos una valoración cognitiva inicial de todas las personas participantes. Consiste en la realización de una batería de test para la detección precoz de deterioro cognitivo leve y/o con sospecha de demencia. Esto nos permitirá detectar posibles casos de esta última patología. Una vez evaluadas, se procederá a realizar las sesiones de entrenamiento de la memoria, de una hora y media de duración, donde de manera semanal, se trabajarán distintos aspectos cognitivo (atención, funciones ejecutivas, razonamiento lógico, cálculo, memoria visual, etc.) o el entrenamiento en estrategias, técnicas de memoria.

–El aislamiento y la soledad no deseada, imagino que no ayuda.

–A lo largo de nuestra trayectoria profesional y con la experiencia de los talleres, hasta ahora desarrollados, dentro de este campo, nos hemos dado cuenta que los proyectos de prevención del deterioro cognitivo ayudan a reducir el aislamiento y soledad no deseada, favoreciendo la creación de relaciones sociales y una mejora de la red de apoyo de las personas participantes.

–En caso de detectar casos de demencia, ¿cómo actúan?

–Ante una sospecha de demencia, lo habitual es derivar a la persona a los servicios médicos de Atención Primaria para que evalúen y derivan al especialista correspondiente. Desde la asociación prestamos asesoramiento a las familias y pacientes de enfermedades neurodegenerativas sobre los pasos a seguir ante el diagnóstico. También les damos información y asesoramiento sobre los recursos con los que cuentan, además de ofrecerles apoyo psicológico y recursos específicos para la detección precoz de demencias e intervención, a través del entrenamiento cognitivo. Para todo ello contamos con el aval de los 30 años de experiencia que tiene AFAC.

– ¿Qué tipo de ejercicios o actividades recomiendan para las personas que viven en este tipo de entorno para evitar, en la medida de lo posible, este desenlace?

–Sabemos que la prevención en demencias se consigue interviniendo en factores como la alimentación saludable, el ejercicio físico constante y la estimulación cognitiva, además de mantenerse activo socialmente y prevenir los factores de riesgo cardiovasculares (diabetes, aterosclerosis, obesidad, tabaquismo y tensión arterial alta).

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