Lanzan unos innovadores trajes de baño infantiles con protección solar

Montar una empresa en otro país no parece tarea sencilla, pero nuestros protagonistas lo consiguieron con creces. «Mi marido es abogado y viene del mundo de la consultoría. Era el responsable comercial de una empresa española en Dubái, y ya había montado varias filiales internacionales, así que tenía experiencia en el sector», explica esta médico especializada en dermatología. Reconocen que lanzar Badawii en la época de la pandemia les daba mucho vértigo, pero que al de pocos meses ya estaban operativos y vendiendo 'online'. Hoy Nicolás trabaja en la gestión y las operaciones de la empresa, mientras que Micaela compagina su trabajo a tiempo completo como dermatóloga en el American Hospital de Dubái con la parte de desarrollo de producto, velando por que cumpla con los más estrictos estándares de protección solar, además de dedicarse a la divulgación médica. «Siempre me ha interesado mucho el área de la dermatología pediátrica y la del cáncer de piel, y nuestro proyecto aúna ambos conceptos», reflexiona.

Desarrollar una marca de bañadores con protección solar para niños es una idea original y revolucionaria, ya que no existen muchos negocios parecidos en el mundo. «En España el concepto es muy nuevo, porque tradicionalmente nos ha gustado mucho exponernos al sol sin preocuparnos demasiado por la salud. En otras zonas del mundo, como pueden ser Asia o Australia, la concienciación sobre los riesgos que tiene la exposición solar durante la infancia es altísima y estos productos se utilizan a diario», apunta esta joven mamá. Ella se muestra optimista con respecto al tema, y pretende instruir a la población a través de la información y educación correcta. En Badawii, también aspiran a romper la creencia de que la ropa con protección solar es fea y aburrida. «Desde el principio tuvimos claro que era crucial que nuestros productos gustasen tanto a los padres como a sus hijos, ya que la forma más efectiva de que los niños estén protegidos del sol es que les encanten los bañadores y siempre quieran usarlos», inciden los creadores, que creen que la playa es un lugar que pide a gritos color.

Sus productos, que van desde los 35 a los 50 euros, siguen una línea muy viva y juvenil, de estilo cañero y con un punto gamberro. «Son perfectos para localizar a los peques desde lejos. Están diseñados en torno a la protección solar, con la máxima certificación existente: UPF 50+. Las siglas UPF (Ultraviolet Protection Factor) indican cuanta radiación UV (UVB y UVA) penetra en la piel a través de un tejido. UPF 50 significa que tan solo 1 de cada 50 rayos de sol atraviesa ese tejido», explica Micaela. A la hora de crear, siempre intentan que cada modelo cubra la máxima superficie de piel expuesta, sin olvidar que deben ser prácticos y cómodos. Por el momento, su oferta cubre trajes de baño de cuerpo entero para bebés (6-12 meses, 12-18 meses y 18-24 meses), trajes de baño para niñas (de 2 a 8 años) y camisetas unisex (de 2 a 8 años).

Como dermatóloga que lleva muchos años en activo, esta bilbaína defiende a capa y espada la importancia de inculcar desde una edad temprana unos hábitos correctos de exposición y protección solar. «Lo más importante es que las madres y los padres entiendan lo sensible que es la piel de sus pequeños al sol, y que una inadecuada protección solar durante la infancia es uno de los factores más influyentes en el desarrollo de cáncer de piel en la edad adulta. Se trata del cáncer más diagnosticado a nivel mundial y la gran mayoría se podría prevenir con una correcta protección solar, según lo avalan innumerables estudios científicos y asociaciones de dermatología, como por ejemplo la 'Academia Española de Dermatología y Venereología', la 'Academia Americana de Dermatología o la 'Skin Cancer Foundation'», incide convencida.

Badawii Beachwear acaba de estrenar una nueva página web, esta vez con dominio español. Los fundadores esperan que sus diseños tengan tan buena acogida como en Oriente Medio, donde también se encuentran posicionados en tiendas de ropa de niños, comercios de moda de baño, resorts y clubs de playa. Su objetivo es ubicarse en lugares donde «los padres puedan verlo, comprarlo y empezar a usarlo». Este año, además, tienen muchas novedades preparadas para sacar al mercado, como complementos que suman en protección solar, como gorras y gafas. Además, puede que pronto se animen a ampliar el tallaje (niños más mayores y adultos) y a crear bañadores tipo pantalón a juego. «Estamos pensando en hacer ropa de protección solar para otras ocasiones, como para practicar deporte al aire libre. Ahora mismo estamos cerrando una ronda de financiación para expandir nuestro negocio internacionalmente, reforzar la estructura interna de la empresa, desarrollar nuevos productos y ser más sostenibles. Tenemos un plan muy ambicioso para estar presentes en Europa, Oriente Medio y América Latina en 2024», concluyen Nicolás y Micaela emocionados.