Ruth Beitia: «Aunque mido 1,91, nunca diré que no a ponerme un tacón»

La figura de Beitia en Cantabria es muy relevante en diferentes ámbitos: deporte, política, vida social… y, en los últimos años, la moda. Beitia viste «clásica y tirando mucho de los básicos»; un estilo que coincide con una de las marcas para las que ha desfilado recientemente: Ángel Schlesser. Pueden ser las raíces en Cantabria -y la amistad a su creador de origen- o la coincidencia en los estilos, que, junto con Carolina Herrera, son sus firmas bandera.

«Vestido y botas, o una gabardina» son sus prendas favoritas ya que, según la deportista, «son ideales para Cantabria». A pesar de ello, Beitia admite que nunca podría renunciar a «un vaquero, unos tacones y una americana negra». Porque según la deportista, «mido 1,91, pero nunca diré que no a ponerme un tacón».

Una larga trayectoria deportiva y años de experiencia asistiendo a eventos de toda índole le han llevado a tener claras sus elecciones. «Para la noche: un vestido negro; y para el día: algo más clásico, un vestido y una americana». Apuestas seguras. Casi tan seguras como que nunca se podría «unas botas blancas».

Ruth Beitia se está convirtiendo en uno de los iconos de la moda regional y sus 'must-have' ya no son un secreto. A pesar de que no tiene problemas para desprenderse de lo material, su complemento ideal es un bolso heredado de su madre: «no sé si es de marca o no, pero es mi complemento favorito», confiesa. Un complemento que, por cierto, no puede faltar en su armario «prefiero los bolsos grandes para el día a día, aunque, de vez en cuando también apuesto por la comodidad de las bandoleras o de una cartera pequeña».

Hablando de complementos, Beitia asegura que no puede faltar en ningún armario un reloj «es el accesorio básico por naturaleza». Además, en su caso, siempre va acompañado por una pulsera que compró en 2011 en Tiffany's Nueva York, «'Desayuno con Diamantes' es mi película favorita, me compré allí esta pulsera y, desde entonces, siempre me ha acompañado».

Son muchas las referencias externas que componen el estilo final de una persona: el cine, la música, los hábitos… y los iconos. La cántabra reconoce que su principal referente es Naty Abascal, «es muy elegante, un verdadero icono». Y es que, a pesar de adecuarse a las tendencias, Beitia es fiel al estilo clásico y elegante. Por ello, su apuesta en cuanto a invertir en moda es «en prendas más especiales, porque los básicos van y vienen». En el caso de los bolsos sigue tendencias dentro de su estilo como con el Speedy de Louis Vuitton: «Me gustan las cosas que no pasan de moda y que puedes usar en muchas ocasiones… te dan un toque de elegancia sofisticada», confiesa.

Y no todo es moda, la belleza es otro de esos factores que delimitan el estilo de la cántabra, que apuesta por el maquillaje natural: «sobretodo quiero que me ilumine, cuando llevo mucho maquillaje no me reconozco». Lo que sí que no puede faltar en su rutina diaria de belleza es la hidratación, «me acostumbré cuando competía; la piel del cuerpo y la cara sufre mucho», comenta Beitia, que además hace especial hincapié en que, a pesar del poco maquillaje que utiliza, siempre se lava la cara antes de hidratarla.

Lo que está claro es que el estilo nuestra olímpica es tan clásico como elegante; un estilo que, según su perspectiva, «coincide con el de las cántabras». Beitia cuenta entusiasmada que le enorgullece saber que su estilo «es referencia a nuestra ciudad y región. El estilo de las cántabras es súper elegante».