¿Tienes el coche parado estos días? Consejos para su correcto mantenimiento

El estado de alarma y el confinamiento por la crisis del coronavirus ha provocado tiendas y empresas cerradas, miles de personas confinadas en casa y mucho menos tráfico por las carreteras. En las carreteras de Cantabria ya no hay los atascos propios de las horas punta y poco a poco la presencia de vehículos es cada vez menor. Eso implica que muchos coches se queden durante varios días parados, ya sea en el parking o en la calle. Incluso si no se utilizan para hacer la compra o para trabajar, pueden estar semanas sin moverse, algo que desde luego no es bueno para su mantenimiento.

Aunque en líneas generales no pasa nada por dejar el coche parado varias semanas, sí hay una serie de recomendaciones que se pueden poner en práctica para evitar que, a la hora de cogerlo de nuevo, nos llevemos una desagradable sorpresa.

Cuando un coche está parado mucho tiempo lo primero que va a sufrir es la batería, especialmente en aquellos modelos más antiguos. Si la batería no está en buen estado, podría incluso descargarse completamente en unos pocos días. Para periodos muy largos, algunos conductores optan por desconectar totalmente la batería, aunque esto puede provocar fallos electrónicos cuando se vuelva a encender (especialmente en los modelos con pocos años de antigüedad, ya que prácticamente todo depende del sistema electrónico). Lo más sencillo es arrancar el motor del coche de manera regular, una vez a la semana o cada diez días, para evitar su descarga y dejarlo al ralentí unos minutos. Incluso si es posible circular algo, aunque sea dentro del parking, mejor.

Otro aspecto a tener en cuenta es que los neumáticos de nuestro coche también sufrirán al estar mucho tiempo paradas. Para empezar, pierden presión de no usarse, por lo que a la hora de volver a coger el coche hay que revisarlos bien. Las ruedas se podrían hasta deformar de estar mucho tiempo soportando el peso del coche, por eso lo recomendable es que tuvieran algo más presión de la habitual antes de dejar el coche mucho tiempo parado. También es buena opción desplazar un poco el coche, aunque sea solo unos centímetros, para que no repose todo el peso siempre en la misma zona de la rueda y cambiar los puntos de apoyo.

Como en el caso de la batería o de las ruedas, cualquier elemento electrónico de nuestro vehículo que lleve muchas semanas sin usarse es susceptible de fallar cuando retomemos la actividad normal. Así que en largos periodos de inactividad, es útil activar en ocasiones dispositivos como el aire acondicionado, los parabrisas, los espejos retrovisores o las ventanillas.

Esto es una obviedad, pero cuanto más limpio se quede el coche durante el tiempo que va a estar parado, mejor. Si duerme en el garaje, se le puede poner una funda de tela o una lona que le protega mejor del sol, de la humedad o de cualquie otro agente externo. Y por dentro, evita dejar restos o basura que generen humedad o malos olores.