Cómo limpiar las botas de agua para la próxima vez que te las pongas

Con este tiempo lluvioso y húmedo, la forma de vestir de muchos se ha visto afectada. Las sandalias que ya habíamos tenido la oportunidad de sacar han vuelto al fondo del armario durante un días y las gabardinas, chubasqueros, las botas y, sobre todo, los paraguas, vuelven a primera línea. Ahora, el estilo más propio de la primavera o el otoño devuelve el protagonismo las botas de agua, también conocidas como botas de lluvia o botas 'katiuskas'. Son el calzado ideal para los días lluviosos porque protegen los pies y gran parte de las piernas del agua de los charcos y el barro.

Eso sí, estos zapatos se llenan de suciedad rápidamente y, aunque están preparados para aguantar agua, lodo o fango también sufren daños y hay que cuidarlas para que se conserven en el mejor estado posible y se puedan seguir usando cuando la ocasión lo requiera.

El caucho suele ser el material principal del que se componen las botas de agua o de lluvia y, con el tiempo, pueden aparecerles unas manchas blanquecinas características de este material, que se producen como efecto la exposición a diferentes temperaturas o por el mero paso de los años. Estas marcas son algo difíciles de quitar y por ello, hoy te contamos un truco y varios consejos para dejar tus botas de agua casi como nuevas.

En primer lugar, pasa una esponja con agua y jabón neutro por todo el exterior de la bota, frotando suavemente. Así quitarás la suciedad superficial del uso. Después usa un trapo húmedo para retirar el jabón y los restos que puedan quedar de la limpieza inicial, es importante que no quede ninguna marca porque las botas se volverán a ver sucias en cuanto se sequen.

Para que se sequen, la mejor opción es ponerlas al aire libre, pero no expuestas directamente al sol ni a niguna fuente de calor, porque pueden dañar el material. Una vez secas, es momento de tratar esas temidas manchas blancas, si es que tus botas las tienen.

Para ello, hay marcas conocidas como Hunter que ofrecen su propio spray pulidor, que sirve para estas manchas blancas pero, hay otras opciones, y aquí viene el truco: puedes usar crema hidratante para tus botas de agua, de forma que estas zonas blanquecinas se puedan quitar con más facilidad y devuelva el brillo inicial. Un tipo de crema ideal para esto es la clásica Nivea de la lata azul.

Echa la crema y extiéndela con un trapo suave mientras pules las botas con cuidado, puedes repetir este paso si lo consideras necesario en las zonas más afectadas. Según algunos internautas, otro producto que cumple con esta función sería el abrillanta neumáticos, concretamente el de Krafft, que se aplicaría de la misma forma que la crema.

Con estos procedimientos, seguro que tus botas quedan perfectas después de cada uso en estas semanas de lluvia que se están dando y que se prevé que duren varios días más.

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