La borraja: una verdura muy aprovechable

La borraja es una planta aromática, de flores azules, blancas o rojas, que en la cultura gastronómica nacional se utiliza como verdura, a diferencia de otros países en los que se degustan como caldos cortos (Alemania) o para rellenar como si fueran hojas de parra (los orientales). Depurativa, emoliente, expectorante, sudorífica, descongestiva, astringente y antiinflamatoria, tradicionalmente se ha asociado como medicina natural contra la fiebre, la tos y la depresión.

Crece silvestre en muchos lugares de tierras fértiles y húmedas, en los bordes de las carreteras y en las laderas de las montañas. Se caracteriza por los pelos coriáceos blanquecinos que recubren hoja y tallo. Su color y sabor es muy parecido al del pepino. Su cultivo está más presente en el norte, donde también es más tradicional encontrarla en las mesas, siendo la protagonista de algunos platos de cuchara (pochas con borraja y chorizo, al vapor, y, aunque en las mesas españolas puede resultar difícil encontrarla, su cultivo, en crema...).

En cuanto al origen de su nombre hay diferentes versiones. Están los que defienden que procede del latín «borra», que significa pelo rígido. Y quienes creen que procede del árabe, «bu-araq», padre del sudor, debido a las propiedades sudoríficas de sus flores. La planta llegó a Europa a través del comercio de los árabes, que la trajeron de su origen, el noroeste de África,

Entre sus propiedades destaca su elevado contenido en agua, un 93%, y su bajo contenido en hidratos y grasas. Es una de las verduras con mayor cantidad de potasio, que contrarresta la riqueza en sodio. Entre las sustancias más benefactoras, los taninos y betacarotenos que aporta. Sus hojas tiernas, también tienen un importante contenido en vitamina C.

De la borraja se puede aprovechar todo, desde el tallo hasta las flores. Las hojas se han utilizado tradicionalmente hervidas, con un poco de aceite. O bien, en crudo, para ensaladas. Perfectas para elaborar caldos o potajes. Con las hojas frescas se prepara un refrescante zumo útil en las dolencias hepáticas y también como depurativo. Por no hablar de las infusiones que pueden prepararse cociendo las hojas y flores, previamente sometidas a un proceso de secado.

Para los pequeños de la casa también puede ser un alimento muy idóneo, bien hervida y acompañada de patata y zanahoria. Y se puede elaborar una tortilla de patata con un toque original.

El único inconveniente que tiene es la paciencia que requiere para limpiarla, quitándola los pelillos que cubren tallos y hojas.