El Café del Centro Botín incorpora un menú del día

El restaurante de la semana ·
Se estrena la propuesta diaria a un precio de 25 euros y además hay una carta de clásicos del grupo

José Luis Pérez

Santander

Domingo, 28 de julio 2024, 15:49

Hace ya siete años se inauguró el Centro Botín, un complejo expositivo y para convenciones al que se dotó de un área de hostelería en la zona inferior de uno de los edificios, completamente acristalada y con unas espectaculares vistas de la bahía y junto a los jardines de Pereda. La explotación de este espacio fue asignada hace tres años al Grupo Riojano que lidera Carlos Crespo. Tras unos ligeros cambios, la cafetería ha conseguido consolidarse como un lugar recomendable para desayunar, almorzar, tomar un café a media tarde e incluso merendar. También se atiende a grupos para cenas concertadas y a las propias necesidades que tengan tanto en propio centro como la Fundación Botín.

Carlos Crespo, también con la experiencia de compartir la dirección del Grupo Cañadío en Madrid, siempre está dispuesto a introducir en sus negocios cambios que respondan a las 'gastro' tendencias del momento y a las inquietudes de los potenciales clientes. La última gran novedad, tras consolidadar el binomio que forman en el trabajo entre los fogones y en la sala –Lucía Machicado y Begoña Cires– ha decidido implementar por primera vez en el Café Centro Botín un menú diario, un primer paso para dar un nuevo aire al concepto del negocio. Más accesible y práctico para todo tipo de públicos.

Para elegir

Lo primero que llama la atención del menú es su buena relación precio-calidad. La cifra de 25 euros incluyendo una bebida, es equilibrado a la vista de lo que hay en el entorno. El comensal puede elegir entre tres entrantes, tres principales y dos postres. La joven Lucía Machicado (26 años), con experiencia previa en el Corral de la Morería y en El Serbal después de haber hecho Dirección de Cocina en Alcalá de Henares, formula platos clásicos, con un toque de su propio estilo, pero sin incurrir en la tentación de caer en las florituras.

Así, para comenzar se puede elegir entre un original salpicón de pulpo bañado por una sopa fría de maíz y pepino; unos cogollos con 'nuestro' aliño acompañados de queso y boquerones; y una crema de temporada, que en esta ocasión era un salmorejo pero que otro día puede ser un ajoblanco o un gazpacho.

Para el plato principal el abanico de opciones pasa por un lingote de cochinillo en salsa de su propio jugo y crema de boniato; una rape asado, bien de punto, sobre una espuma de parmentier trufada y una guarnición de chalotas pequeñas confitadas en tomillo; y un clásico cachón en su tinta con arroz cremoso.

Y para terminar, dos postres para elegir: un impecable tiramisú en vaso y una muy demandada mousse de limón.

En definitiva, un menú interesante que irá evolucionando con el paso de las semanas.

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Picoteo de terraza

Mientras el menú solo se sirve en el comedor, en la terraza también es posible picar algo a partir de una carta –en proceso de construcción– donde brillan con luz propia los clásicos del Grupo Riojano, especialidades infalibles que en algunos casos se pueden pedir en formato de media ración. Así están las croquetas cremosas de jamón, las rabas de calamar, el pastel de cabracho, la ensaladilla rusa, la ensalada de gambones, los buñuelos de bacalao, el pulpo y el steak tartar.

Finalmente hay que destacar la amplia oferta a la hora de los desayunos –tortilla, dulces, flautas, tostadas, pulgas...– con café Dromedario, y la presencia de la tarta de queso de grupo a la hora de las meriendas.