El consumo del vino repunta ligeramente en España

El sector del vino cerró el año 2024 con un aumento del 2,5 % en el consumo nacional, hasta los 9.874 millares de hectolitros tras el repunte que experimentó en diciembre, según el último informe de la Organización Interprofesional del Vino de España (OIVE). Los datos del Sistema de Información Vitivinícola (Infovi), recogidos en este estudio, revelan que el consumo de vino nacional es, además, el «más elevado» desde octubre de 2022. Diciembre, con un 15,5 % de avance, y abril, con un 13,8 %, fueron los dos meses en los que más subió este consumo. Por su parte, la producción de vino y mosto acumulada en los cinco primeros meses de 2024/2025 fue de un 15 % más que en el mismo periodo de la campaña anterior, hasta los 36,7 millones de hectolitros.

Estos datos positivos llegan en una coyuntura complicada para el sector tras vivir una etapa de incertidumbre, con rivales como la cerveza que afloja la demanda de vinos y con bodegas que han acumulado unos volúmenes de stock muy por encima de la admisible financieramente.

La enorme competencia que existe entre bodegas y la gran calidad de muchas de ellas son aspectos que se reflejan en las cifras del sector que depende en gran medida de las exportaciones.

Pese a estas buenas cifras, las exportaciones del vino español cerraron 2024 con un aumento del 1,4% en valor, hasta los 2.977 millones de euros, pero con una caída del 5% en volumen, hasta los 1.953 millones de litros, según el último informe de la Interprofesional del Vino de España. Se trata de la segunda mejor cifra en términos de valor, tras el récord en 2022, sin embargo hay que remontarse a 2013 para encontrar una cifra más baja en volumen, de acuerdo al informe.

En términos absolutos, la facturación por exportación aumentó en 41 millones de euros respecto a 2023, pese a que se redujo en 101 millones de litros el volumen exportado.

Un reflejo de estas tendencias se pone de relieve en la principal marca de calidad. La Denominación de Origen Calificada Rioja ha presentado un balance positivo en 2024, con un crecimiento del 0,63% en sus ventas y un liderazgo en el mercado español a pesar de la recesión. Asimismo, las ventas de Rioja en el exterior crecieron un 4,42%, con 98.827.453 litros comercializados en 2024, exportando a 135 países.

Por otro lado, según los datos de la Agencia Estatal de Administración Tributaria de España recogidos en el informe respecto a las importaciones de vino durante los primeros cuatro meses de la campaña 2024/2025, estas han crecido más del 100%.

El valor de las ventas de vino en España ha ido subiendo de forma progresiva en los últimos años. Esto es debido, en parte, por la relevancia de los segmentos de mayor valor añadido de los últimos años pero también por el entorno inflacionista en el que nos encontramos. El crecimiento para el conjunto de canales (Alimentación + Hostelería) se situaría en un +1,0% y todas las categorías de producto incrementarían sus ventas en valor. En este sentido, el vino con DOP fue el único segmento que creció por debajo de la media (+0,4%) ya que el resto de tipología de vinos muestran incrementos de +3,0% para vinos con IGP, de +2,3% para vinos sin IGP, +6,3% para el segmento de 'Vino Resto' y +1,9% para vinos espumosos. Estos últimos, además, son los que alcanzarían el precio medio más alto con 7,71€/litro por delante de los vinos con DOP que alcanzan los 6, 45€/litro. En términos de precio medio si bien todos los tipos de vino suben en valores corrientes, no sucede lo mismo en términos reales. Descontada la inflación, el precio medio por litro a nivel global disminuiría un ligero -0,4% siendo únicamente los vinos con DOP (-1,1%) y vinos espumosos (-0,4%) los que mostrarían una ligera reducción en sus precios medios deflactados.

En el ámbito internacional, donde la coyuntura es desfavorable para el sector del vino y su consumo, con un descenso del -11,46%, el temor a los aranceles ha generado más incertidumbre al sector, hasta el punto que importadores estadounidenses han comprado más volumen de vino español en los últimos meses de 2024, coincidiendo con la candidatura de Trump por la incertidumbre el devenir de la situación arancelaria. España es el cuarto país proveedor de vino a EEUU con 374 millones de euros.

Cantabria da un paso adelante en la promoción del enoturismo con su primera participación en la VI edición de Fine Wine Tourism, la feria internacional especializada en enoturismo que se celebrará los días 5 y 6 de marzo en Valladolid. La representación de la región correrá a cargo de la Asociación Cántabra de Empresas Productoras de Bebidas Alcohólicas, Cantabria Brinda, impulsada en 2023 por la Oficina Agroalimentaria de CEOE Cepyme Cantabria.

Para esta edición, esta Oficina Agro, coordinada por Paloma Fernández, ha impulsado esta participación en la feria con la colaboración con Rafael López-Alonso, de Wine Two Trip, especialista en enoturismo y en el diseño de experiencias turísticas vinculadas a la visita de bodegas y sidrerías. López-Alonso está convencido de que Cantabria es la «joya escondida del norte de España» en el enoturismo.

'Cantabria Brinda: del mar a la montaña' es el lema elegido para mostrar la riqueza y diversidad de la oferta enoturística. El objetivo de esta participación es posicionar los vinos de Cantabria y dar a conocer el enorme potencial de la región.

El enoturismo en Cantabria está en crecimiento, con un aumento en la cantidad de bodegas y de viñedos visitables, así como por la calidad de las bebidas que en la región se elaboran.

Dentro de la feria, las empresas asociadas que ofrecen experiencias enoturísticas tendrán un papel protagonista, mientras que el resto de integrantes de Cantabria Brinda formarán parte de los packs de experiencias diseñados para dar visibilidad a los productos locales en un contexto turístico.

La participación de Cantabria en Fine Wine Tourism supone una oportunidad clave para consolidar su presencia en el sector enoturístico y establecer conexiones con operadores nacionales e internacionales. Participarán profesionales de 26 países.

Cantabria Brinda reúne a una veintena de bodegueros cántabros y productores de vino, sidra, cerveza y destilados.

Según datos del Directorio Central de Empresas (Dirce) del Instituto Nacional de Estadística (INE), a 1 de enero de 2024, el número de bodegas en España ascendía a 3.925 (empresas cuya actividad principal corresponde al código CNAE 1102: 'elaboración de vinos'. Con respecto a enero de 2023, este número ha aumentado en 82 empresas (+2,1%).

Por comunidades autónomas, en 2024 fue Cataluña la comunidad que contaba con más empresas elaboradoras de vino, con 598. Supera a Castilla y León, que desde 2018 era la comunidad con más bodegas, quedándose en 2024 con 596. A cierta distancia encontramos a Galicia, con 390 bodegas, Castilla-La Mancha, con 357 bodegas, País Vasco, con 356, La Rioja, con 313 y Andalucía, con 312 empresas elaboradoras de vino, a 1 de enero de 2024.

Ya por debajo de las 200 bodegas, está la Comunidad Valenciana, con 198, Comunidad de Madrid, con 165, Aragón, con 125, Islas Canarias, con 124 y Extremadura, con 112 bodegas.

En un último grupo, con menos de 100 bodegas, encontramos a Islas Baleares con 96, Navarra, con 88, Región de Murcia, con 61, y Asturias y Cantabria, con 17 cada una.

En el caso de Cantabria, lo más destacable es el crecimiento y consolidación de bodegas, aunque las cifras sean mínimas en comparación con otros territorios. El sector vitivinícola en la región ha crecido notablemente en el periodo analizado en esta estadística, entre 2008 y 2024, en la que figuran una decena de nuevos proyectos. No obstante, si comparamos la cifra de INE y la facilitada por la Odeca –en la página anterior–, en la suma de bodegas de la costa y de Liébana hay una desviación mínima de una bodega, 18 frente a 17. En cualquier caso, se advierte una ligera tendencia ascendente fruto del empuje de emprendedores que vislumbran un futuro interesante para el sector en la región, en gran medida por los efectos positivos que puede tener el cambio climático para los viñedos.

Durante los últimos 16 años, desde el año 2008, el número de bodegas ha descendido en España en 265, siendo entonces el número total de 4.190. Por comunidades autónomas, el País Vasco es la que más ha reducido su número de bodegas en 2024, respecto a 2008 (-209 bodegas), seguido de Castilla-La Mancha (-137 bodegas), La Rioja (-103), Extremadura (-50), Galicia (-34), Navarra (-32), Aragón (-12) y Región de Murcia (-5). El resto de comunidades, las aumentaron en estos 16 años.

Castilla y León fue la que más lo hizo, con 118 empresas más, seguida de Cataluña (+89 bodegas), Islas Baleares (+37), Andalucía (+31), Comunidad de Madrid (+15), Islas Canarias (+11), Cantabria (+10), Asturias (+4) y Comunidad Valenciana, con 2 bodegas más respecto a 2008.

El Ministerio de Agricultura ha decidido activar la cosecha en verde en viñedos destinados a la producción de vino. Esta medida, que se implementa por tercer año consecutivo, cuenta con 19,2 millones de euros. El objetivo es estabilizar el mercado del vino, excedentario en algunas regiones, mientras que Cantabria, cuyos viticultores están en condiciones de crecer y tiene recorrido comercial para hacerlo, no disponen de los permisos de plantación necesarios sin tener que recurrir a comprarlos.

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