Francia quiere que la Unesco reconozca la 'baguette' como Patrimonio Inmaterial

El pan español no tiene nada que envidiar al francés. El pan elaborado de forma artesanal en muchas zonas españolas goza del reconocimiento y prestigio internacional. Pero, sin embargo, los galos han sido mucho más prácticos y han ganado por la mano a los españoles a la hora de 'catapultar' uno de sus principales emblemas gastronómicos y la 'baguette', la barra de pan más típica de la gastronomía francesa, será candidata al patrimonio cultural inmaterial de la Unesco, informó recientemente el Ministerio de Cultura galo confirmando los movimientos que ya habían comenzado a darse algunos meses atrás, y que puede resultar una excelente campaña de márketing para la elaboración francesa que no solo cobra importancia en el país sino que hace yiempo que ha adquirido relevancia internacional.

De lograr ese reconocimiento, la inscripción de la 'baguette' «permitiría tomar conciencia de que una práctica alimentaria que forma parte de la vida diaria, compartida por todo el mundo y dada por descontado, constituye un patrimonio en sí mismo», según un comunicado emitido por los solicitantes de la declaración de bien inmaterial.

El ministerio recordó que el número de panaderías en Francia «no deja de retroceder, sobre todo en las comunidades rurales». «En 1970, había 55.000 panaderías artesanales (una por cada 790 habitantes) frente a 35.000 hoy en día (una por cada 2.000), a menudo en beneficio de la venta de 'baguettes' producidas de forma industrial».

El término 'baguette' para designar la barra de pan alargada y estrecha que tanto se asocia a la cultura de los franceses apareció a principios del siglo XX. Se trata de un pan hecho de harina, agua, sal y levadura que debe tener entre cinco y seis centímetros de ancho, tres o cuatro de alto, ochenta y cinco de largo y un peso en torno a los 250 gramos, según aportan los panaderos galos. El 98 por ciento de los franceses lo come a diario, sin embargo, la Confederación de Panaderos Franceses ha considerado que este pan necesita de una protección que la declaración de patrimonio inmaterial le puede otorgar. La institución gala considera que la 'baguette' está en peligro ante la proliferación de variantes congeladas, cada vez más habituales tanto en los lineales de los supermercados como en las mesas de Francia.

La Unesco inscribe cada año casi un centenar de bienes en el patrimonio inmaterial mundial. Una de las condiciones de aceptación es que el objeto candidato concierna a toda una comunidad, como es el caso de los panaderos para la 'baguette'.