La historia del queso de Cantabria y sus 250 variedades, recopilados en un libro

'Quesos de Cantabria' constituye un estudio sobre este producto y su evolución en la Comunidad Autónoma, al incluir abundante documentación gráfica y fotográfica. A través de sus páginas se analizan conceptos básicos, la historia y diferentes tipos de este y otros derivados lácteo.

Pero el «meollo» del libro son los propios quesos de una región que destaca no tanto por la cantidad que hay -que no es «exagerada»- como por la «indiscutible» calidad de los mismos. Muestra de ello son las tres denominaciones de origen existentes, para el queso de nata de Cantabria, que cuenta con una «larga tradición», al igual que el azul Bejes-Tresviso y los quesucos de Liébana.

Además de estas y otras elaboraciones y la historia y evolución a lo largo del último milenio, el libro incluye una síntesis de los estudios de las últimas décadas en base a los trabajos de expertos de reconocida solvencia, como Manuel Arroyo.

También dedica un capítulo a la Cofradía del Queso de Cantabria como órgano estimulador de este producto regional en toda España y que este año cumple el XXXV aniversario de su fundación.

Y aborda además la gastronomía, a través incluso de recetas, o la posibilidad de contar en el futuro con un Museo del Queso en la Comunidad Autónoma.

Durante la presentación del libro el consejero de Ganadería y Alimentación se ha mostrado partidario de apoyar iniciativas que contribuyan a incrementar el conocimiento, el reconocimiento y la puesta en valor de un producto como el queso para Cantabria, al que ha defendido como «parte de la historia y el patrimonio» regional.

Asimismo, Blanco ha reafirmado el compromiso del Gobierno con los ganaderos y artesanos queseros, «parte esencial de lo que somos en la región», y ha asegurado que su departamento va a seguir comprometido con la promoción de alimentos.

Una muestra de ello, ha dicho, es el apoyo del Ejecutivo autonómico a la elaboración de este libro, en cuya presentación se ha mostrado partidario de conservar y fomentar el «generoso» patrimonio agroalimentario como parte de la cultura y las señas de identidad de Cantabria.

También ha abogado por impulsar el sector primario para que la leche de gran calidad que generan las explotaciones ganaderas de la región sigan ofreciendo «un excelente queso con una originalidad, una diferenciación y una calidad excepcionales».

Unas cualidades que, en su opinión, son fruto de la conjunción de materia prima con unas características especiales debido a su origen geográfico y la tradición y el saber hacer de los artesanos queseros que existen en Cantabria, una región «genéticamente ganadera».

Blanco también ha tenido palabras de elogio para el autor del libro, Pedro Arce, por saber plasmar la historia de los quesos y queseros de la región a través de unos ilustres personajes que han contribuido de manera especial al desarrollo de esta industria en la Comunidad.

Así, se ha referido al doctor Arroyo, bromatólogo cántabro que se dedicó a la investigación, desarrollo y expansión de los quesos a nivel nacional e internacional; Pedro Casado, que contribuyó a la creación de la denominación de origen de España 'Queso de Nata de Cantabria, y al empresario cántabro Zacarías Puente, que en los años ochenta del siglo pasado creó las primeras ferias queseras de la región, además de la Cofradía del Queso de Cantabria, que colabora en la edición del libro que hoy se presenta.

Guillermo Blanco también ha destacado y reconocido la labor que llevan a cabo «todas las cofradías» de Cantabria para llevar los productos cántabros «allá donde vayan».

En la rueda de prensa ha intervenido asimismo el Gran Maestre de la Cofradía del Queso de Cantabria, Miguel Ángel Díaz, que ha señalado que la publicación de este libro era «una vieja reivindicación de la cofradía» y ha agradecido la «colaboración y predisposición» de su autor, Pedro Arce, quien por su parte ha destacado la «gran variedad y calidad de los quesos de Cantabria» y las «posibilidades de este producto en el mundo culinario».