Un lechazo de raza churra al horno, sobresaliente en la Posada Asador Ribera del Pas

El edificio de piedra, ampliado en la parte posterior y rodeado de una lustrosa finca cerca de la cual transcurre la vía verde del antiguo ferrocarril Santander-Ontaneda, cuenta con un comedor presidido por un horno que marca en gran medida el estilo castellano de la cocina que ha implantado en esta casa María Luisa. Ella es de Aranda de Duero, donde su familia tuvo viñedos y donde conoció a José Luis, originario de Iruz, pueblo al que regresó a comienzos de siglo para recuperar del olvido y del abandono esta torre y convertirla en un negocio viable que ahora dirige una de sus hijas, Patricia.

Este contexto explica que aquí se pueda disfrutar con un extraordinario lechazo asado al horno. La materia prima, ejemplares de raza churra, certificados, de menos de 15 días, así como el resto de la carne, las morcillas y, por supuesto, el vino, de la cooperativa a la que estuvo vinculada la familia, proceden de Aranda. La huerta propia y el producto de temporada completan una carta equilibrada donde también brillan con luz propia las croquetas casaeras de carne, aunque también pueden ser de pimientos, gambas o berenjeas; los embutidos; los quesos; o el cochinillo, que como el lechazo se elabora por encargo. El ritual de preparar el horno con la leña de encina y del asado lleva casi tres horas y en Ribera del Pas quieren que el lechazo o el cochinillo lleguen a la mesa en condiciones perfectas.

Y ciertamente que es así como se ha podido comprobar con un cuarto delantero de lechazo degustado en esta ocasión. Impecable de punto, pura crea su carne y exquisito de sabor. Se acompaña de la clásica ensalada de lechuga, tomate y cebolla.

En carnes también se ofrecen entrecot, chuleta, chuletón, solomillo y las chuletillas del lechazo que se preparan también al horno. Así mismo hay habitualmente riñones a la plancha, mollejas de lechazo, chorizo a la brasa..., y en temporada, revuelto de setas, setas, boletus y níscalos. En este último caso, se degustaron con una elaboración en el propio horno.

El punto final del almuerzo debe ser aquí un postre de elaboración propia, las tartas caseras entre las que destaca la de queso, las peras al vino (de Ribera de Duero, por supuesto) o el flan de la casa.

El buen estado de conservación de las instalaciones y espíritu anfitrión de los propietarios ayudan a que la experiencia sea positiva.

Dirección: Barrio La Iglesia nº 12, Iruz (Santiurde de Toranzo).

Teléfono: 942 597 082 y 618 011 808.

Propietarios: María Luisa Cayuela y José Luis Martínez.

Dirección: Patricia Martínez Cayuela.

Inaugurado: 2005.

Estilo de cocina: Tradicional y con raíces castellanas

Precio medio de la carta: Entre 40-50 euros.

Menú diario: No.

Menú degustación: No.

Capacidad: 40-45 comensales.

Terraza: Para medio centenar de personas. Cubierta y acristalada, con vistas al jardín, en un lateral de la torre.

Cierra: Abierto todos los días.

Bodega: Unas veinte referencias.

Wifi: Sí.

Alojamiento: Siete habitaciones dobles.

Aparcamiento: Sí, propio.