Entre mordiscos carnívoros y elogios nutritivos
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Desde las icónicas escenas de Pulp Fiction' y 'Un día de furia' a los documentales denuncia con 'Super Size Me' a la cabezaEl mordisco más mediático del mainstream, el que está asociado al cine de Hollywood y a las superproducciones y blockbusters, suele incluir una hamburguesa. Una reunión coral, una escena con la comida rápida incorporada a la conversación de los protagonistas, un jocoso encuentro o ... una cita con la violencia. La ficción muestra con profusión esa parada en fotogramas donde la hamburguesa de cine tiene mucho que decir hasta con la boca llena. Icono de la cultura pop, sobre la plancha o a la parrilla con doble de queso, en un festival de referencias, escenarios y míticos espacios, siempre adquiere una notoriedad nada anecdótica. De la animación al thriller, prácticamente todos los géneros contienen referencias al mordisco carnívoro o al elogio nutritivo, a la quedada en el burguer globalizado o a la cita de amigos en torno a un plato de pisos superpuestos, kétchup como una ola y abundante ración de patatas fritas. Y lugar aparte, y nada baladí, lo ocupa la mirada documental en su mayoría con afán de denuncia.
El título emblemático en este sentido es 'Super size me', que logró un gran efecto mediático, conocido en Latinoamérica con el ilustrativo título de 'Súper engórdame'. Morgan Spurlock, cineasta independiente, a lo Michael Moore, inserta su bisturí en las entrañas del sistema y diseccionalos males de las cadenas de comida basura. Spurlock durante un mes (en 2003), dedicó su alimentación exclusivamente al consumo de artículos exclusivamente de McDonald's de modo que propició la denuncia de sus efectos tanto físicos como psicológicos.
Como receta de la cultura popular la historia burger es global, desde esas escenas callejeras ambientadas en Nueva York, San Francisco o Boston, hasta los encuentros míticos como el de John Travolta (Danny) en 'Grease', la película que marcó a una generación, y Olivia Newton-John. Las variaciones son infinitas y los ingredientes juguetones pero es difícil que no asome el trozo de carne de vacuno entre dos panes bien empapados en kétchup y pepinillos. Luego no faltan la hamburguesa de ternera , las lonchas de queso, la mostaza, las hojas de lechuga, la cebolla, los tomates y, por supuesto los bollos. No obstante, a la ternera se le suma en otros casos las hamburguesas de pollo, de pescado, con o sin cebolla, de tofu, de kobe.
Los personajes de animación nunca se han olvidado de la hamburguesa, entre lo lúdico y lo divertido: Cocoliso, Olivia y Popeye; Bob Esponja y las cangreburgers y, cómo no, Los Simpsons, sin olvidar la 'lluvia de albóndigas' y su diluvio interminable. La tarantinada, esa mezcla de destello, humor, arrebato, salida de tono y provocación que irrumpe surreal en sus filmes como un guiño de complicidad, tiene uno de sus mitos en el Big Kahuna de 'Pulp Fiction' con Samuel L. Jackson saboreando una hamburguesa entre diálogos no menos apetitosos, hasta su canto a las excelencias nutritivas del producto como «piedra angular de todo buen desayuno». Lo singular es que la famosa hamburguesa y su cadena Big Kahuna -recurrente en otros filmes dirigido o producido por Quentin Tarantino, como su ópera prima 'Reservoir Dogs', o 'Four rooms'-, no existe. No obstante su receta ha sido carne de canon en muchas ocasiones: la carne picada de ternera y de cerdo; la cebolla caramelizada; las rodajas de piña natural, más el pepinillo y el bacon configuran su combinación directa al paladar de la pantalla.
Al hoy odiado y defenestrado Kevin Spacey, que ha sembrado la pantalla de grandes interpretaciones, se le recuerda por una curiosa secuencia de 'American Beauty' donde encarna al protagonista Lester Burnham. En una hamburguesería se ve obligado a tomar el pedido de su mujer, quien no sabe que él trabaja en una cadena de comida rápida, y acude al local con su amante.
En 'La Pantera Rosa' más reciente la de 2006 con Steve Martin y Jean Reno llegan a la conclusión que el aprendizaje del inglés solo es posible si se consigue pronunciar correctamente 'hamburguesa' en ese idioma. Las series no se libran. Un ejemplo casi obligado está en uno de los episodios de 'Cómo conocí a vuestra madre', en el llamado The Best Burger in New York, donde los amigos persiguen el objetivo de comer la mejor hamburguesa de la mítica ciudad.
'Good burguer', 'La colina de la hamburguesa', 'Dos colgaos muy fumaos'... son algunos otros títulos donde de manera parcial o vertebrando escenas y ambientes la hamburguesa se convierte en el mantra de la ficción. Aunque a veces amarillistas y truculentas, las miradas documentales no han tenido piedad en sus denuncias. Un título canónico con la personalidad de su cineasta Richard Linklater es 'Fast Food Nation'. Desde la ficción pero con espíritu de crítica ácida, a más de uno se le puede atragantar su plato. La investigación de un factor tóxico en el proceso de elaboración de una hamburguesa muta en alegoría del mundo laboral y el modelo de producción. Una serie de historias se cruzan entre Estados Unidos y México, entre la cúpula de mando de una poderosa cadena de restaurantes el proceso productivo, el tráfico humano y hasta el gore tienen su lugar en el filme.
Michael Douglas, por su parte, en 'Un día de furia' desató sus modales más convincentes con un arma en la mano en una hamburguesería cuando quería desayunar. Su personaje Bill Foster alcanza el cénit de la visceralidad cuando el encargado se niega a servirle por haberse pasado tres minutos de la hora de desayunos. Y en 'Dos tontos muy tontos' Jeff Daniels y Jim Carrey, viven una parada con matón incluido y muerte a base de pepinillos en una hamburguesa especial.
En definitiva , uno de los fenómenos gastronómicos más extendidos, por su popularidad e influencia, en su versión gourmet o en la más zafia y vulgar, tiene innumerables reflejos en pantalla: del icónico cotidiano al colesterol capitalista, asoma toda la cadena de producción imperialista.
Como rúbrica irónica ahí queda ese 'Mejor muerto': Una hamburguesa rockera con la voz de David Lee Roth, de Van Halen, y el protagonismo de John Cusack, en 'Everybody Wants Some!! (Better Off Dead)'.
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