Pescado salvaje, del mar a la mesa en El Cazurro

Situado sobre los acantilados de la playa de La Arnía, en Liencres, se encuentra El Cazurro, establecimiento que además de unas privilegiadas y espectaculares vistas del paisaje de la Costa Quebrada, ofrece toda la frescura del mar en su mesa.

Su actividad hostelera comenzó a finales de los sesenta y desde 2011, Juan Rodríguez y Nacho Fernández se encuentran al frente del negocio. La despensa del Cantábrico es su principal proveedor con el pescado salvaje como principal reclamo. Precisamente hasta el 29 de febrero tendrán disponibles unas jornadas gastronómicas dedicadas a estos ejemplares -lubina, machote, san martín, jargo...-.

Solo para las cenas, proponen un menú de 60 euros para dos personas que incluye un entrante a elegir de la carta -zamburiñas, langostinos, pulpo, ensaladas...-, un kilo aproximado de pescado salvaje -según disponibilidad- con guarnición, postre a elegir, bodega -albariño, verdejo o Rioja crianza de la casa- y café.

Abierto de jueves a domingos tarde durante el invierno, todos los días se guisa un plato de cuchara marinero, y se ofrece en carta por cinco euros: garbanzos con buñuelo de bacalao, patatas o alubias pintas con cachón, alubias blancas con almejas, garbanzos con langostinos...

Otras de las propuestas son los arroces -con verduras, negro con cachón, marinero o con bogavante- y las mariscadas, siempre por encargo. Las raciones, una opción perfecta para un picoteo generoso con recomendaciones como anchoas del Cantábrico o boquerones en vinagre, salpicón de marisco, croquetas de cachón en tinta, maganos encebollados, mejillones en salsa o vinagreta, pudin de cabracho, rabas de magano, verduras de temporada a la plancha, pulpo a la gallega, vinagreta o plancha, entrecot... Y los postres, caseros: arroz con leche, tarta de cerveza Guinnes, de queso, de zanahoria, tres chocolates...