Pescados y carnes «de aquí», referencias básicas del Restaurante Gelín

En el restaurante Gelín, de Nueva Montaña el cliente tiene muy poco margen para equivocarse. Una cocina tradicional, de producto, mayoritariamente de temporada y fresco, con elaboraciones sencillas que no empañan la calidad de la materia prima y una excelsa y bien surtida bodega con más de 150 referencias son una garantía para el comensal. Puede considerarse a este clásico establecimiento familiar con 65 años de trayectoria vital con un referente para poder repetir varias veces a lo largo del año.

Al frente del restaurante están Julia y Gelín, que han cogido el relevo de sus padres a quienes aún se les ve en el restaurante y que siguen siendo unos excelentes anfitriones.

La carta es estable, con ligeras incorporaciones cada temporada para dar rienda suelta al producto de calidad a partir de recetas de siempre. El chef Frank de la Rosa sigue el guión de una casa en el que los pescados -más a la plancha pero también al horno y fritos- y las carnes de Cantabria son la enseña. Eso no quiere decir que no se incorporen platos nuevos, es el caso de unos buñuelos de bacalao, unas croquetas de txangurro, un steak tartar de solomillo o el tomate de Tudela. Además, no faltan las sugerencias del día, especialmente pescados para dos o más comensales.

Los mariscos son otro de los puntos fuertes de Gelín, desde las gambas a la plancha hasta las colas de langostinos al ajillo, la crema de marisco, las navajas, las cigalitas a la sartén, las nécoras (cocidas o a la plancha), las cigalas, el bogavante del Cantábrico, el pulpo a la gallega, las almejas finas a la sartén o a la marinera, los mejillones en salsa o las zamburiñas a la plancha.

Además de tres tipos de ensalada y de los arroces (bogavante, almeja fina y negro con ali oli), hay una nutrida variedad de entrantes, destacando las rabas de calamar fresco, las anchoas de Codesa, los callos de bacalao, las mollejas -empanadas o a la parrilla-, el foie de pato, un cremoso de setas al foie que como dice Juanjo -un miembro del equipo de sala- «es una explosión de sabores en el paladar», o los ibéricos y la cecina.

Son habituales en la carta la merluza de pincho a la plancha, rebozada o en salsa verde, el cogote de ésta, el jargo, la lubina, el sapito y las cocochas de bacalao a la romana o en salsa verde. San martín y machote son opciones que depende de lo que haya entrado en lonja. Aún en temporada de bonito, éste se ofrece a la plancha, encebollado o con tomate. Y el bacalao, a la vizcaína, con tomate o a la plancha.

En carnes, el chuletón es la 'estrella', por delante del entrecot o el solomillo, todos a la parrilla a partir de carne de Cantabria con una maduración de unos treinta días. Además se ofrece carrillera, chuletillas y escalopines empanados.

Los postres caseros completan un recital que se puede degustar en los renovados comedores o en un espacio privado muy acogedor.

Dirección: Av. Nueva Montaña 2. Santander.

Teléfono: 942 33 27 33.

Propietarios: Familia Castanedo Lanza.

Dirección: Julia y Gelín Castanedo.

Inaugurado: 1957.

Jefe de cocina: Frank de la Rosa.

Sala: Juanjo, Adelina, Juan y Raúl.

Estilo de cocina: Tradicional.

Precio medio: 40 €.

Menú diario: No.

Capacidad: 80 comensales.

Terraza: 15 plazas.

Horario: 7.30 h. a fin de cenas.Cierra: Domingo y noche del lunes.

Café: Dromedario.

Aparcamiento: Sí.

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