La dorada, a la sal, a la plancha, al vapor, al horno...

La dorada tiene un cuerpo ovalado y comprimido, su dorso es verde azulado, con el vientre plateado y blanco y manchas negras en las aletas.

Es un pescado muy apreciado en la gastronomía, y además es muy versátil porque proporciona muchas posibilidades de elaboración: parrilla, horno, vapor, fritura, etc., aunque la más conocida son la dorada a la sal, la dorada a la espalda y al horno.

Rica en ácidos grasos muy beneficiosos y recomendados para prevenir problemas cardiovasculares, como son los ácidos omega 3 y omega 6, es un pescado blanco muy ligero y de sabor muy suave que tiene pocas calorías y es bajo en grasa. Se encuentra entre los mejores pescados para incluir en la dieta, y destaca también por su exquisitez.

Para saber escoger una dorada fresca lo primero que hay que verificar es que su carne sea firme al tacto. Las agallas han de tener un color rojo vivo y los ojos brillantes y no hundidos, ni con manchas blanquecinas y, sobre todo, que su olor a mar sea poco pronunciado.

Para una mejor conservación, ha de ser a baja temperatura porque esto evitará el deterioro de la pieza. Así que un buen consejo es comprarla en el último momento, como se debe hacer, por otra parte, con cualquier otro pescado.

Entre sus propiedades, destaca la cantidad moderada de proteínas que aporta, aunque son de alto valor biológico. Es fuente de minerales como el potasio, fósforo, sodio y magnesio y un aporte menos relevante de hierro. Entre las vitaminas, es rica en las liposolubles, sobre todo del tipo A y E.

No sólo es muy recomendable para incluirla en dietas, sino que también es apropiada para la alimentación en épocas de crecimiento y de esfuerzo intelectual. No obstante, el único inconveniente que puede tener son las muchas espinas.

Perteneciente a la familia de los espáridos, tal vez la forma más sana de prepararla sea a la sal, al menos es una de las más conocidas y apreciadas, sobre todo en la alta gastronomía. Es una manera sencilla puesto que únicamente precisa sal gorda, retirar las espinas y cocinarla al horno. La carne queda muy jugosa.