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Las alcachofas y el jamón van de la mano, sin lugar a dudas, es difícil precisar exactamente cuando juntaron sus caminos, pero a lo largo de la historia en tantas y tantas recetas aparecen adaptándose a las preferencias locales. Por eso esta combinación estoy más ... que seguro os va a encantar.
Alcachofas.
Jamón.
Fideos.
Una cebolleta.
Aceite de oliva.
Sal.
Pelamos y cocemos las alcachofas. Os recomiendo no utilizar limón una vez peladas, es preferible que se queden un poquito oscuras a que sepan a limón. Llenamos una olla con agua y añadimos sal, la ponemos al fuego y la llevamos a ebullición. Cuando esté hirviendo añadimos las alcachofas peladas y las dejamos a fuego medio durante unos 20 minutos.
Una vez transcurrido este tiempo las sacamos y las escurrimos, dejamos que se enfríen ligeramente y las cortamos longitudinalmente por la mitad. Es importante reservar parte del caldo de la cocción porque con eso vamos a mojar los fideos.
En una cazuela doramos unos taquitos de jamón, con una cucharada de aceite de oliva, y los retiramos. Después marcamos las alcachofas bien escurridas, primero por la parte interior hasta que queden con ese aspecto tostado y después las damos la vuelta, y las reservamos.
Nos ponemos con los fideos. En esa misma cazuela los añadimos y los tostamos un poco, hasta que veamos que cambian de color. Me gusta utilizar fideos de los que usamos para la sopa, incluso una pizca más grandes, pero que no sean demasiado gruesos. Una vez dorados, los reservamos y nos ponemos con el sofrito. Yo solo añado una cebolleta fresca bien picada, un diente de ajo y un par de cucharadas de tomate frito. Eso sí, tenemos que conseguir un sofrito bien reducido, que la cebolla apenas se note, que se vayan homogeneizando todos los ingredientes hasta que nos quede casi una pasta de sofrito.
Añadimos los fideos y seguidamente un poco del caldo de la cocción de las alcachofas. Según vayamos viendo que va necesitando le añadimos poco a poco, teniendo en cuenta que al ser tan finos los fideos se hidratan enseguida y no necesitan mucho caldo.
Cuando veamos que está casi a punto de finalizar la cocción, colocamos las alcachofas y unos cristalitos de sal por encima de éstas, los tacos de jamón y un chorrito de aceite de oliva del rico.
Listo, lo tenemos, un plato diferente, que servimos rápidamente para que no se enfríe. Si queréis lo podéis acompañar con un poco de alioli.
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