La receta del día: el bonito que vino de oriente

Ingredientes

• Lomos de bonito.

• Salsa de soja.

• Miel.

• Aceite de sésamo.

• Arroz basmati.

• Ajo.

• Jengibre fresco.

• Limón

Elaboración

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   En un bol mezclamos 6 cucharadas de salsa de soja, 4 de miel, una de aceite de sésamo y lo removemos todo bien para que se integre, sobre todo la miel que es lo que costará un poco más. Picamos ahora un par de dientes de ajo bien finos (se puede utilizar un rallador), así como un trozo de jengibre fresco, y el zumo de un limón, volvemos a moverlo todo y lo reservamos.

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   Limpiamos bien los lomos del bonito y los ponemos en una fuente un poco profunda. Volcamos el contenido del bol encima, asegurándonos que quedan bien cubiertos. Si no llega habrá que hacer más marinada. Lo dejamos al menos 30 minutos en la nevera, cuanto más tiempo esté ahí más sabor tendrá el bonito; con un par de horas es suficiente.

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   Ponemos una sartén grande al fuego medio-alto, sacamos los lomos de la marinada, que reservaremos para después, y los secamos bien con papel de cocina. Untamos con un poco de aceite de oliva la sartén y doramos los lomos por todas las caras durante unos 2-3 minutos, no más que se nos seca. Los sacamos y los reservamos.

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   Vertemos ahora la marinada en la sartén y la calentamos a fuego medio, cocinándola durante unos minutos hasta que espese ligeramente y se forme una salsa.

Elaboración del arroz

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   Vamos con el arroz. Yo utilizo el basmati, pero podéis acompañarlo del que más os guste, yo creo que en éste caso queda muy bien así. Para que nos quede perfecto el arroz necesitamos que las medidas sean un tanto precisas. Por una taza de arroz basmati vamos a agregar 1 ¾ tazas de agua, pero lo primero que tenemos que hacer es lavarlo, enjuagando el arroz basmati bajo agua fría hasta que el agua salga clara, para eliminar el exceso de almidón y a que el arroz quede más suelto.

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   Agregamos el arroz lavado y escurrido a una olla mediana, añadimos el agua y una pizca de sal al gusto, lo movemos un poco y subimos el fuego para que el agua llegue a hervir, una vez alcanzado el hervor, bajamos el fuego y tapamos la olla con una tapa ajustada. Lo dejamos así durante al menos 16 minutos, o hasta que todo el agua se haya absorbido y los granos estén tiernos. No es bueno destapar la olla durante el proceso de cocción para mantener el vapor atrapado y obtener un arroz más esponjoso.

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   Una vez que el arroz esté cocido, retiramos la olla del fuego y dejamos reposar el arroz tapado durante unos 5 minutos para que los granos terminen de cocinarse con el vapor residual y se separen fácilmente. Destapamos y con un tenedor soltamos suavemente los granos de arroz, así no se nos apelmaza.