¿Sabes cuáles son las propiedades de la fruta de la pasión?

Cultura gastronómica ·
El maracuyá es cada vez más apreciado no solo por su sabor sino también por su zumo y su sabor combina muy bien con derivados lácteos

Isabel González Casares

Santander

Domingo, 15 de octubre 2023, 07:56

El sugerente nombre de fruta de la pasión, seguro que puede dar más que para un provocador bocado. Pero dejando la imaginación a un lado, hablemos de lo que es en realidad este singular alimento que también conoce el nombre de maracuyá, fruto comestible de la planta pasionaria, una especie trepadora propia de zonas tropicales, subtropicales y templadas. De sabor dulce y ligeramente ácido, parecido a la guayaba y mango, tiene una corteza de color morada y otra de tonalidades anaranjadas o amarillentas. Su piel oculta una interior que recoge una pulpa sorprendente por su aroma y sabor exóticos.

A la hora de disfrutar de tan sofisticada fruta, puede ser en fresco, como parte también de macedonias y ensaladas y, sobre todo, para elaborar bebidas. Zumos, batidos e infusiones son deliciosos, como si queremos elaborar mermeladas, confituras, incluso salsas y aliños para acompañar pescados y hasta quesos o yogures. Porque su sabor combina muy bien precisamente con derivados lácteos. Así que se pueden emplear en numerosas recetas de repostería. Por ejemplo, la tarta de maracuyá es impresionantemente buena. Sin olvidar los helados muy especiales también; manjares con un toque diferente.

Características y propiedades

Qué es. El fruto de la planta llamada «Passiflora edulis» y también es conocida como maracuyá.
Beneficios. Es un buen regulador digestivo, con poder saciante y concentración de antioxidantes.
Variedades. Amarilla, la más cultivada y destinada a la producción de zumo y la morada, como fruta fresca.
Consumo. Se puede comer tanto en crudo como para elaborar bebidas, zumos naturales o cócteles.
Su sabor. Tropical, dulce y ligeramente ácido, muy parecido a la guayaba y mango, de marcado aroma.
Cultivo. En España se produce principalmente en las Islas Canarias por sus condiciones climáticas cálidas.
Origen. Procede de Sudamérica, más concretamente de la zona geográfica que ocupa el Amazonas, en Perú.
Su nombre. Dicen, como teoría más popular, que algunos misioneros jesuitas la vieron (siglo XVII) y sacaron un parecido de la flor con la corona de espinas de Jesucristo y con otros elementos que se usaron en la crucifixión, como los clavos.

Si hay que citar las propiedades del maracuyá, empezar porque su principal composición es el agua, por cuanto es un perfecto hidratante, como cualquier fruta tropical. Pero es que además, tiene alto contenido de vitaminas A y C, así como de diversos minerales, entre ellos el potasio, fósforo y magnesio. Gran fuente de fibra, cuenta con un importante poder antioxidante y saciante. Hasta la medicina tradicional la ha tenido muy valorada por asociarla a una alta capacidad tranquilizante.

En España está más presente el fruto de color morado que por regla general se encuentra a la venta en cestas o cajas de varias unidades. Lo mejor, a la hora de escogerlas, es mirar si tienen la piel lisa y algo firme, puesto que si la fruta de la pasión está arrugada quiere decir que ya está demasiado madura, aunque resultará apta para el consumo, cuanto antes, mejor. Y se come, en crudo, habitualmente como un kiwi, lavando y secando la piel antes de cortarla por la mitad y extrayendo la pulpa y semillas con una cuchara. Si tiene mucho jugo se puede exprimir para zumos, bebidas y cócteles que tendrán un sabor entre ácido y dulce. Su temporada idónea está entre los meses de octubre a abril.

Cada vez está siendo más consumida como ingrediente de la cocina, con muy variadas recetas que la incluyen en postres, bebidas y decoraciones.