Cantabria rescatará a Gipuzkoa y permitirá que vierta basura en Meruelo

Aunque la petición de socorro lanzada desde Gipuzkoa se hará oficial hoy, Cantabria ya tiene su respuesta. El Gobierno bipartito PRC-PSOE dirá «sí» a la petición vasca de utilizar el vertedero de Meruelo para depositar «desde ya» basuras procedentes del territorio vasco. Así lo confirmó ayer la vicepresidenta y consejera de Medio Ambiente, Eva Díaz Tezanos, que explicó que se trata de «una emergencia real y un caso de salud pública», ante el que hay que actuar con diligencia, «ayudando a Gipuzkoa en una clara demostración de solidaridad y colaboración entre autonomías en la que debemos progresar e incidir».

A pesar de la urgencia de la petición -el vertedero de Lapatx que utiliza Gipuzcoa se cierra parcialmente el día 3- la respuesta afirmativa cántabra no es improvisada. Desde hace semanas se viene estudiando la viabilidad de acudir al rescate del Gobierno foral, pero siempre preservando el interés de los ciudadanos de Cantabria. Y todos los informes y estudios de los técnicos confirman que la solidaridad imprescindible tendrá como premio, además, un beneficio para la región y en particular para la empresa pública Mare, gestora de la infraestructura de Meruelo.

Díaz Tezanos subrayó que Cantabria puede atender esa emergencia «porque estamos preparados, Meruelo puede acoger esos vertidos y además obtendremos un beneficio evidente». De ahí que, dada la urgencia, se aceptará de entrada que puedan llegar los primeros camiones esta misma semana y con la misma celeridad se concretará el convenio que deben suscribir ambas administraciones, y en particular la empresa Mare y el consorcio vasco de residuos, la entidad GHK. «La respuesta -apuntó Díaz Tezanos- debe ser positiva. Ante una emergencia así debemos mostrar nuestra solidaridad y avanzar en una colaboración interterritorial que además forma parte del criterio y de la acción política del actual Gobierno de Cantabria». Es más, para la vicepresidenta y líder del PSOE, es preciso profundizar en este marco de colaboración que tendría que ser «lógico, obligado y habitual». «Debemos ponernos en su caso si llegado el momento nosotros viviéramos una situación similar», remachó.

Agua para Valle de Villaverde

Desde el Gobierno bipartito se recordó ayer las buenas relaciones existentes con el Ejecutivo vasco. Como ejemplo, se reveló que hace un mes ha sido la Diputación de Vizcaya la que ha atendido una petición en sentido inverso cursada por Cantabria para que, en base a un convenio de colaboración, se haga cargo del suministro de agua al municipio de Valle de Villaverde, ya que el coste para poder garantizar el servicio desde la autonomía cántabra es muy elevado. Y la demanda cántabra recibió el «sí» vasco.

Será a partir de esta semana cuando se detallen los números del acuerdo con Gipuzkoa. Inicialmente se ha estimado que Meruelo podría recibir unas 50.000 toneladas al año, una situación que puede mantenerse durante cuatro ejercicios. Un tiempo que es el que prevé necesario el Gobierno foral para dotarse de una nueva infraestructura de residuos, actualmente en la fase previa a la licitación. Desde Gipuzkoa se habla de que se enviarán al vertedero cántabro entre 20-25 camiones diarios. En todo caso, los residuos serán de la llamada 'fracción resto', por lo que se trata de desechos no orgánicos que no requieren tratamiento. Un hecho que también destacó ayer la vicepresidenta «ya que forma parte del ADN de nuestro Gobierno y es un objetivo a futuro, buscando la total separación de los residuos y abogando por los vertidos limpios, que son más baratos y fundamentales para preservar el medio ambiente».

Municipios beneficiados

Los técnicos que han analizado la viabilidad de aceptar la petición vasca suscriben que Cantabria obtendrá beneficios evidentes con la operación. La llegada de un nuevo cliente aumentará la facturación de Mare en unos 2-3 millones (según se sustancie el acuerdo y el número de toneladas a depositar), y será un soplo de aire fresco para las siempre deficitarias arcas de la empresa pública. Además, este plus económico puede derivar en un beneficio directo para los ayuntamientos de la región ya que el Gobierno está contemplando la posibilidad de abaratar el canon que actualmente pagan por dejar sus basuras en Meruelo (un precio que ronda los 83 euros por tonelada). Y también se mantendrá, y así lo aseguró Díaz Tezanos, el bajo precio que pagan las empresas privadas de Cantabria por el servicio que reciben en la planta de tratamiento.

Lo que todavía no se ha cuantificado es el efecto que tendrá la llegada de un nuevo cliente sobre la generación directa de empleo para atender ese imprevisto depósito de basuras; se da como seguro, pero no hay datos reales.

En definitiva, desde el Gobierno de Cantabria se considera que el 'rescate' a Gipuzcoa es «solidaridad que se convierte también en una oportunidad».

«Damos una respuesta inmediata a una llamada de auxilio de Gipuzkoa, pero lo hacemos preservando y buscando siempre lo mejor para los ciudadanos de Cantabria, tras analizar con rigor el caso y comprobar que estamos preparados para poder prestar ese servicio», concluyó la vicepresidenta Díaz Tezanos.