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Abel Verano
Viernes, 12 de febrero 2016, 18:00
La intensa y persistente lluvia que regó este viernes Cantabria dejó una jornada caótica para el tráfico, con numerosos accidentes en distintos puntos de la comunidad y en zonas colindantes. La autovía A-8 se convirtió en una ratonera en la que quedaron atrapados cientos de vehículos, entre ellos autobuses escolares, por un aparatoso accidente a la altura de Castro Urdiales, en dirección hacia Santander. El derrame de combustible sobre la calzada obligó a la Guardia Civil a cerrar la autovía durante seis horas y a desviar el tráfico por el interior de la localidad, lo que generó fuertes retenciones en toda la zona.
El siniestro se produjo a las 14.35 horas en el punto kilométrico 147, justo en el puente que sigue a la primera salida de Castro Urdiales. Un turismo se salió de la calzada, colisionó contra el guardarraíl y salió despedido a 60 metros de distancia. A consecuencia del impacto, se perforó el depósito de combustible del coche que cayó sobre el pavimento y se reventó una de las ruedas. El combustible convirtió la calzada en una pista deslizante. Para evitar nuevos accidentes se decidió cortar la circulación en este punto para proceder a la limpieza. La circulación fue desviada por el interior de la localidad, donde los vehículos podían volver a tomar el acceso a la autovía. Esto provocó un auténtico caos circulatorio. Las retenciones se extendieron hasta el límite con Cantabria, Saltacaballos y la zona de El Haya, y se prolongaron durante horas. A las seis de la tarde, los operarios de mantenimiento y los Bomberos aún permanecían en la zona. La carretera nacional también quedó colapsada. Dos horas más tarde, la Guardia Civil informaba que la carretera ya estaba totalmente limpia y se abrió al tráfico de vehículos.
El siniestro se saldó con una mujer, que viajaba en el asiento del copiloto, herida de carácter leve. Una ambulancia de la DYAde Cantabria trasladó a la herida hasta el hospital de Laredo para descartar complicaciones.
Detención en Santander
La Policía Local de Santander detuvo al conductor de un turismo que cuadruplicaba la tasa permitida de alcohol y que fue localizado a las 4.05 horas en la avenida San Martín del Pino. El conductor había sido interceptado como consecuencia de una infracción contra las normas de circulación y tras solicitarle la realización de la prueba y dar ésta positivo fue detenido.
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