Europa relaja el control sobre las subvenciones regionales a las aerolíneas

«Cantabria no subvenciona a las compañías aéreas para que operen en el aeropuerto de Parayas». Desde la sede del Gobierno se hartaron de decirlo durante años, pero el mensaje no llegó o, al menos, con toda la credibilidad debida a las oficinas de Bilbao Air, una empresa pública de la que forman parte la Cámara de Comercio de Bilbao, el Gobierno Vasco, la Diputación Foral de Bizkaia y los cuatro Ayuntamientos que rodean al aeropuerto de La Paloma. Su director general amenazó a finales de 2013 con acudir a Europa a protestar. No «una denuncia», pero sí «una alegación», explicaron en su día. Por eso, entre otras cosas, temblaron muchas piernas en Peña Herbosa cuando El Diario hizo públicos los contratos firmados por el Ejecutivo regional y las aerolíneas. Por ejemplo, el de los 3,2 millones al año para Ryanair hasta finales de este mismo 2016. Ahora tiemblan algo menos. Después de una década persiguiendo al menos en teoría el concepto de ayudas públicas a los aeropuertos emergentes, la Comisión Europea anuncia una tregua. Un respiro y una facilidad más para las negociaciones que se mantienen con la propia línea irlandesa para que siga operando en el Seve Ballesteros.

«La ayuda a la inversión a los aeropuertos regionales, siempre que se cumplan ciertas condiciones, no da lugar a distorsiones indebidas». Más aún, «puede mejorar tanto la accesibilidad de ciertas regiones como el desarrollo local». Son frases de Margrethe Vestager, comisaria europea de Competencia, recogidas en un artículo del diario Cinco Días. La nueva directriz, ya en trámites, allanará el camino de los trámites y evitará tener que esperar el visto bueno de Bruselas para las subvenciones a los aeródromos. Esto, según los expertos, «beneficiará a los aeropuertos con menos de tres millones de pasajeros al año, siempre y cuando no se encuentren a menos de cien kilómetros de otra pista o a menos de 60 minutos de trayecto en coche o en transporte público (incluido el tren de gran velocidad)», según recoge el texto del diario económico.

Ryanair carga sus rutas

Un obstáculo menos para seguir hablando con Ryanair sobre el futuro. Justo lo que hace el Gobierno con el horizonte del final del último convenio firmado con los irlandeses (que caduca en noviembre). Unas conversaciones con mejor pinta tras el anuncio de una nueva ruta para la próxima campaña de invierno. Santander conectará con Berlín con dos vuelos por semana, si bien esa opción no aparece aún cargada en la web de Ryanair. Es la única que no está disponible de todas las que ya se conocen. Comprar billetes para ir el próximo invierno a Bruselas Bruselas, Barcelona, Tenerife, Roma, Edimburgo o Londres ya se puede.