Valdecilla cerrará 65 camas en su primer verano tras el estreno del nuevo edificio

Una aclaración con la que quiere acallar las críticas suscitadas por esta decisión, porque «vamos a mantener esas camas en el nuevo Valdecilla, aunque de momento estarán repartidas por las torres, en las habitaciones que sobren de otras especialidades». Pascual defiende que, «a diferencia de consultas y quirófanos, camas tenemos de sobra para asumir la planta de Medicina Interna de Liencres». Una reubicación «disparatada» a juicio del sindicato ATI, que opina que «se antepone la rentabilidad del hospital a los derechos de nuestros mayores, los más débiles, a los que, para obtener salud han de ir de ahora en adelante de la ceca a la meca». En cambio, el sindicato de enfermería Satse apoya la decisión de la Gerencia, al «tratarse de una unificación pensada en el bien de los enfermos, ya que en Liencres no se dispone de UCI».

Las 65 camas que efectivamente se cierran son la suma de 13 de Geriatría de Liencres «mantenemos abiertas 15, ya que ningún verano han superado esa cifra», las 24 de una de las plantas de Cirugía General y Digestivo (dispondrán de otras 66), 10 de Cirugía Cardiovascular, 6 de Neumología y 12 de Traumatología y Ortopedia. El gerente sostiene que «es una previsión holgada», aun superando las cifras de los últimos veranos 36 en 2014, 32 en 2013 y 52 en 2012. Cabe recordar que el año pasado no se planificó ningún cierre de camas debido al vacío de poder que hubo en la Gerencia en pleno verano, desde la salida de César Pascual hasta el nombramiento de su sucesor, como consecuencia del cambio de Gobierno.

Circunstancia «especial»

Los sindicatos son conscientes de que «estamos ante una circunstancia especial porque a corto plazo y por primera vez estará todo el hospital reorganizado». Por eso formaciones como UGT y Satse temen que «esta centralización de los servicios, con la integración de la Residencia y de parte de Liencres, se traduzca en pérdida de puestos de trabajo». Ninguna de las dos comparte «la táctica del cierre de camas cuando Cantabria es una comunidad con una alta afluencia de visitantes, y por tanto de potenciales pacientes». Para Satse, además, que «se planifique con esta antelación y sin haberse acabado siquiera el traslado» le resulta «muy precipitado ». También CC OO juzga que es un «intento de propuesta organizativa poco realista a tan largo plazo». El gerente justifica la premura en «las presiones» de los profesionales. «Como en cualquier empresa, la gente nos reclama conocer cuándo pueden coger las vacaciones», concluye.