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Pilar Chato
Jueves, 31 de marzo 2016, 17:45
Los pescadores de río de la región preparan ya aparejos y equipos para lanzarse al río este viernes. Se abre la temporada de trucha. Ahora se mira cómo bajan los caudales y al Boletín oficial de Cantabria (BOC), pues la orden que regula la ... pesca en aguas continentales tiene un sinfín de disposiciones y excepciones para días de pesca, cotos, cebos.
No obstante, no toda la temporada de trucha se abre ahora, ya que la pesca de esta especie en los cotos salmoneros no comienza hasta el 15 de mayo. Aún no hay datos de cuántas licencias de pesca se han cerrado este año, ya que se pueden sacar durante toda la temporada. En años anteriores han rondado las 9.000.
Mirando solo al río, lo que se ve son caudales muy fuertes por las lluvias de los últimos días que hacen que baje el agua muy turbia. Lo explica Óscar Quevedo, pescador profesional y guía de pesca, quien cree que va a ser una apertura de temporada difícil, por lo que solo los pescadores tradicionales tienen alguna posibilidad en estos primeros días, a causa del tipo de cebos utilizados. Hay que tener en cuenta, no solo las lluvias, sino la nieve caída en las últimas semanas, y que la tierra no puede absorber más agua.
Y revisando al BOC lo que se ve son las novedades que introduce la normativa. Entre las más destacadas, tres. Hay más tramos vedados, lo que reduce los kilómetros de río en los que se puede pescar. Se modifican algunos cebos: para la pesca de la trucha en los tramos salmoneros únicamente se autoriza el empleo de mosca seca y mosca ahogada; y se prohíbe la pesca con cebo natural en todos los cotos de trucha (la anterior temporada había tres donde se permitía).
Como tercer cambio, se reduce el cupo de truchas por pescador. Hasta ahora se permitían ocho ejemplares por día, que a partir de este año se han reducido a seis.
Ángel Serdio, jefe del servicio de Conservación de la Naturaleza, recuerda que Cantabria era la comunidad con el cupo más alto, y que el debate sobre el número adecuado se había abierto hacía tiempo. Al principio se pensó en hacerlo de forma progresiva, si bien finalmente se optó por un solo plazo. El proyecto es realizar un estudio por cuenca y aplicar los cupos, y otras disposiciones, en cada una de ella en función de su situación.
Óscar Quevedo precisa que, aunque este viernes comienza la temporada, el hecho de que en los ríos salmoneros no se pueda pescar trucha todavía limita mucho las zonas en las que efectivamente los aficionados a la trucha van a poder echar las cañas. Serán algunos tramos del Miera (Lierganes-San Roque); del Saja; del Besaya (las Fraguas), el Pisueña (Villafufre), la parte alta del Nansa. El Pas , el Deva y el Asón están cerrados hasta mayo por ser ríos salmoneros.
En los últimos años se han ido introduciendo cambios en la normativa referida a los sistemas de pesca, las fechas y los días. Ahora queda prohibida la pesca todos los lunes y jueves. La talla mínima para el salmón son 45 centímetros y para la trucha, 19 centímetros (salvo excepciones)
Quevedo se queja de cómo han ido reduciéndose los días de pesca en Cantabria, lo que sitúa a esta región "en desventaja" con el resto de comunidades vecinas. Es el caso de Asturias, donde se puede pescar todos los días (salvo los jueves en algunos tramos) desde el 20 de marzo hasta el 15 de agosto, e incluso hasta el 30 de septiembre en algunos ríos. En Castilla y León la pesca es diaria desde el 3 de abril al 15 de octubre.
Otra de las quejas de los pescadores que traslada Quevedo es la dificultad para sacar licencias. Pone como ejemplo que los extranjeros no pueden usar el sistema informático de la Consejería. "¿Cómo se va a utilizar así la pesca como un recurso económico para Cantabria?", se pregunta
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