Comienza la cuenta atrás para el prefijo telefónico 942

Cuando Cantabria agote las posibilidades que le quedan de adjudicar números de teléfono en la red fija abandonará el 942 y tendrá que pasar al 842, prefijo que tiene adjudicado la región desde 1999 cuando, a medio plazo, supere sus posibilidades de utilizar el prefijo que hasta ahora tiene.

Para Cantabria, la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia (CNMC), que es el organismo que regula entre otras cuestiones la telefonía, sitúa a Cantabria entre las provincias en las que «no hay riesgo a corto plazo de agotamiento» pero que tiene que ir pensando en esta posibilidad en menos tiempo de lo que quizás piensa. Cantabria tiene ahora mismo datos del último mes de 2015 asignadas 249.411 líneas de telefonía fija (la población de la región está cifrada en 582.117 personas), lo que viene a significar que hay un número de teléfono fijo cada dos habitantes.

De momento, no hay ningún número que tenga como anteposición el prefijo 842 pero este ya está adjudicado a esta región para el momento en que se agoten las posibilidades de crear número antepuestos al actual 942. Cada provincia y desde 1999 tiene una alternativa de prefijo para el caso de agotar sus bloques de números de teléfono. No confundir el prefijo 842 (gratuito) con los 803, 805, 806 y 807 que tienen una tarifa especial.

Así y todo, Cantabria se encuentra entre las provincias de España que más a medio que a largo plazo, pueden tener que acceder al ya dispuesto prefijo telefónico fijo alternativo. Según los datos aportados por el último informe de la CNMC (2015), la región tiene agotados el 76% de los que dispone para asignar número de teléfono fijo. Concretamente tiene asignados 96 bloques; 120 atribuidos, con una ocupación de casi el 80%, y una capacidad de maniobra del 24%. En el ranking de quienes peor lo tienen en la maniobrabilidad de adjudicación de nuevas líneas de telefonía fija, con un margen de posibilidades del 3%, está Madrid (91 de momento de prefijo y a punto de abonarse al 810 como alternativa), siguiéndole en urgencia, con un 11%, Guipúzcoa, que pasará del 943 al 843.

«La Comisión fija en un 25% el umbral para considerar la situación como menos preocupante», explican desde la CNMC, y Cantabria está en el 24%, es decir, rozando el nivel de alerta.

Desde la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia se ha explicado que la posibilidad de agotamiento de los recursos de numeración geográfica en algunas provincias españolas considerando en nivel de«alerta» por encima del 80% les ha llevado a controlar cómo, cuánto y para qué se utiliza la telefonía fija. «La gratuidad del uso de este tipo de comunicaciones telefónicas, como parte del paquete que se vende junto al teléfono móvil e internet, ha llevado a que, casi sin usarlo, el cliente se abone a un número fijo aunque sea residual en utilización», explica Javier Martinberri, ingeniero cántabro de telecomunicaciones. Entre ellas está saber cuánto se usa un número asignado, el control de operadores y la migración que se produce.

Por eso la Comisión ha iniciado el análisis de una serie de parámetros «para asegurar una mejor gestión y el uso eficiente de la telefonía fija».

En el último Plan Nacional de Numeración realizado en 2015 se atribuyeron 86,5 millones de números a las diferentes provincias en toda España, de los que ya se han ocupado el 79,8%. Quedan libres aún 17,5 millones de números.