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Álvaro San Miguel
Domingo, 18 de diciembre 2016, 07:39
La relación entre los socios de Gobierno en Cantabria sigue deteriorándose hasta el punto de que chocan incluso cuando dicen estar de acuerdo. El presidente y líder regionalista, Miguel Ángel Revilla, desautorizó el viernes a la Consejería de Urbanismo (PSOE) por oponerse a la propuesta del Ayuntamiento de Santander para minimizar las consecuencias de la anulación de su Plan General.
«La postura de la Consejería de Díaz Tezanos no es la del Gobierno», declaró a este diario el presidente cántabro. Horas más tarde (ayer), la vicepresidenta del Gobierno y líder socialista, Eva Díaz Tezanos, enviaba un comunicado para informar de que «el Gobierno aún no ha tomado una decisión sobre el PGOU». Una afirmación que deja en tierra de nadie a su director general de Urbanismo, que se opone a seguir el camino propuesto por el Ayuntamiento de Santander y que apoya Revilla.
El PRC, que votó a favor del Plan General de Santander hace cuatro años, es partidario de introducir una serie de medidas transitorias en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos, como propone el Ayuntamiento. El PSOE prefiere sacar adelante la nueva Ley del Suelo y resolver con ella el problema del bitrasvase del Ebro, que es el causante de la anulación del Plan General. Lejos de tratar de aclarar esas diferencias entre la postura socialista y la regionalista, Díaz Tezanos optó por atacar a su rival histórico, el PP: «En Cantabria hay personas que no tienen ninguna autoridad para hablar en materia de urbanismo, sino todo lo contrario.
Sus antecedentes son chapuzas urbanísticas y un urbanismo depredador y a la carta que ha hecho mucho daño. Lo que le hace falta a nuestra región, a nuestros ciudadanos, es que quienes dirigen las políticas desde el Gobierno garanticen la seguridad jurídica sin los desastrosos atajos cuyas consecuencias estamos pagando hoy. No estamos dispuestos a hacer más chapuzas porque los parches no sólo no han solucionado los problemas urbanísticos de Cantabria sino que además ha costado mucho dinero a las arcas públicas y mucho sufrimientos a muchas familias».
La vicepresidenta insistió en que la peor imagen urbanística de Cantabria consiste en tener cientos de sentencias de derribo «producto de los desmanes de unos pocos, tener que derribar Vuelta Ostrera o tener todo un catálogo de leyes y planes generales declarados inconstitucionales por haber hecho políticas a la carta carentes de responsabilidad y con el único objetivo de arrancar un montón de votos sin tener en cuenta el sufrimiento y las consecuencias de esas acciones».
Desde las filas populares
La primera figura del PP que habló ayer sobre este nuevo desencuentro entre PRC y PSOE fue la alcaldesa de Santander, Gema Igual, que aplaudió la postura «coherente» del PRC frente a la «falta de corresponsabilidad» del PSOE ante la ayuda solicitada por el Ayuntamiento. Poco después, se pronunció el concejal de Urbanismo de Santander, César Díaz, que ante las críticas de Díaz Tezanos replicó que el Plan General se elaboró «con todas las cautelas legales, tal como han constatado el Tribunal Superior de Justicia de Cantabria y el Tribunal Supremo, y si se ha anulado ha sido por la deficiente evaluación ambiental que hizo el PSOE del bitrasvase». El último líder popular en subirse al carro fue el propio presidente del PP, Ignacio Diego, que aprovechó la cena de Navidad del partido para censurar al bipartito por sus enfrentamientos internos.
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