Secciones
Servicios
Destacamos
J. Martínez Teja
Jueves, 19 de enero 2017, 07:20
Los arzobispos venían de Burgos cuando les dejaban sus muchas obligaciones o lo permitían las cambiantes condiciones climatológicas y los malos caminos, pero pasaban ciclos completos de dieciocho años antes de que se viera a alguno en las tierras cántabras.
El pleito por cuestiones ... territoriales eclesiásticas entre Santander y Burgos, al "pretender aquella erigirse en diócesis independiente", se había iniciado en el siglo XVI, siendo rey Felipe II, y no fue resuelto hasta que Francisco de Rábago, confesor de Fernando VI, urgiera la cuestión ante el Papa. Finalmente, el 12 de diciembre de 1754, Benedicto XIV publicaba la bula por la que Santander se constituía en cabeza de obispado, la vieja abadía de los Cuerpos Santos pasaba a ser considerada catedral, y como inevitable consecuencia, la villa se convertiría en ciudad apenas unos días más tarde.
El 9 de enero de 1755, el padre Rábago, natural de Tresabuela, en el valle de Polaciones, hizo que el rey publicara un decreto en el que mandaba a todos "que la hayáis y la tengáis por tal y la llaméis ciudad, así por escrito como de palabra".
LOs datos
Fundación
16 de enero de 1955.
Dirección
Avenida del Cid Campeador, 67, bajo. 09005 - Burgos.
Presidente
José Carlos Ruiz Fuente.
Número de socios
140.
Cántabros en Burgos
3.400.
Instalaciones y actividades
Local con salón social, oficina y bar. Disponen de una bolera de bolo palma en la zona de El Plantío y cuentan con equipos de bolos, ajedrez y fútbol sala, frecuentes vencedores de los torneos intercentros. Celebran la Bien Aparecida con una amplia programación cultural y deportiva, romería y almuerzo de hermandad. Entre sus actividades figura la práctica del montañismo y del senderismo con marchas quincenales por rutas de Burgos o de Cantabria, elección de Reina Mayor e Infantil, juegos de mesa, campeonatos de ajedrez, concursos de dibujo para los niños que ilustran después las tarjetas de Navidad, certamen de fotografía y excursiones. Editaban una revista, El Tejo.
Teléfono
947 232 334.
Correo electrónico
casacantabriaburgos@gmail.com
Página web
www.casacantabriaburgos.es
La dependencia de Cantabria de Burgos en asuntos eclesiásticos, militares y mercantiles persiste en cierto modo. Ya no dirige el puerto de Santander, como antaño, el Consulado del Mar, quien controlaba el floreciente comercio con Flandes, ni tampoco ejerce jurisdicción la Capitanía General de Castilla la Vieja primero, y la VI Región Militar después, la cual englobaba, además de Cantabria, a las tres provincias vascas, Logroño y Navarra, pero la actual Comandancia Militar de Burgos, Soria y Cantabria tiene su sede en esa misma Capitanía, en la ciudad castellana.
Por contra, el norte de Burgos perteneció a la Cantabria antigua, y allí se localizaba la mítica Amaya. Además, en la comarca de Las Loras se han descubierto once nuevos castros cántabros, cuyo estudio puede influir en el relato de las Guerras Cántabras. Por razón de vecindad son muchas las relaciones, y vías importantes de las capitales de ambas provincias llevan el nombre de la otra. La avenida de Cantabria y la calle Santander son principales en Burgos, como principal es la calle Burgos en Santander. Muchos burgaleses tienen una segunda residencia en las costas de Cantabria, y existen lazos de parentesco que alcanzan al mismo alcalde de Burgos, Javier Lacalle, con familia en Mataporquera.
Aquí empezó todo
Precisamente de esa localidad es José Carlos Ruiz, presidente del Centro Regional Montañés, quien lleva viviendo en Burgos cuarenta y dos de sus sesenta años. Fue la proximidad la que le llevó a estudiar la carrera de aparejador a la capital burgalesa, porque era la ciudad más cercana a su lugar de nacimiento en la que se impartían los cursos de arquitecto técnico. Hizo amigos, entabló relaciones con gente de su misma especialidad, se casó y se quedó. No fue el único.
"Muchos conocidos de juventud echaron raíces en aquellas ciudades a las que fueron a estudiar. En los años de escuela en Mataporquera tuvimos la fortuna de contar con un maestro, don Esteban, que se preocupaba mucho por el futuro de sus alumnos, hasta el punto de que él mismo gestionaba las becas para estudiar en Santander, Palencia o Burgos a los chicos que consideraba con más posibilidades".
En Burgos, las profesiones de los residentes cántabros son variadas: empresarios, ingenieros técnicos de Caminos, aparejadores, especialistas en fábricas de producción industrial y ganadera, empleados del Banco Santander y quienes se dedican a la hostelería. El jefe de cocina del Ojeda cuando obtuvo la estrella Michelín era de Ucieda, y un hermano tuvo su propio restaurante.
En 2005, al cumplir el cincuenta aniversario, el Centro Regional Montañés fue el encargado de organizar el segundo encuentro de las Casas de Cantabria en el mundo, y el primero fuera de la comunidad después del fundacional de Comillas, celebrado un año antes.
Burgos, por tanto, se convirtió en la ciudad pionera que acogía un evento de estas características, base fundamental de la unión, colaboración y trabajo en común de los montañeses del exterior. Las reuniones prosiguieron en años sucesivos, hasta que la crisis económica obligó a cancelarlas. Al tiempo, se recuperó la tradición de un partido de bolos entre las selecciones de Cantabria, vencedora del trofeo, y de España, compuesta también esta última, como es natural, por jugadores cántabros. Con tal motivo, las autoridades locales, además de ceder las instalaciones del Teatro Principal, construyeron una bolera en la zona de El Plantío para uso de la Casa, actual escenario de sus campeonatos sociales.
Un largo caminar
La actividad de los montañeses no sólo en sus propios quehaceres, sino en los que organiza el Ayuntamiento, hizo acreedor al Centro del nombramiento de Buen Vecino de Burgos, un título al que hace honor con su colaboración en las fiestas locales, como las de San Pedro y San Pablo o las de San Lesmes, plenamente insertado en una sociedad "amable y hospitalaria, pero de la que en principio te choca el carácter serio de sus gentes y el hablar recio que da la tierra castellana, tan distinto del nuestro". El Centro Montañés, asimismo, es miembro de la Asociación de Casas Regionales de Burgos y de la Federación de Castilla y León.
anecdotario
Según el Reglamento de Honores y Distinciones, "el Título de Buen Vecino de Burgos podrán ostentarlo aquellas entidades o corporaciones que evidencien veinticinco años de laboriosidad continuada, dignidad de conducta y dedicación generosa en el ámbito local". Pronto debió reunir tales méritos el Centro Regional Montañés porque recibió el premio hace ya cincuenta años, en 1966. Además de las actividades propias, participa en cuantas organiza el Ayuntamiento y las federaciones de Casas Regionales de Castilla y León y de Burgos, en las que no faltan las citas gastronómicas, como la muy participativa Fiesta del Buen Yantar. La concesión de una sala de bingo en los ochenta, revocada años más tarde, supuso una mejora tan sustancial en la financiación del centro que permitió la compra de su actual sede social, en la Avenida del Cid.
Han pasado sesenta y un años desde desde la creación de la Casa, el tiempo en el que los cántabros hicieron sus primeras reuniones, a partir de los años 50, en un establecimiento junto a las vías. "En la estación de ferrocarril, en la calle Santa Dorotea, existía entonces el bar David, clave en el nacimiento del Centro Montañés. Los medios de transporte de la época eran todavía precarios y las visitas al pueblo espaciadas, por lo que la colonia montañesa solía concentrarse allí para compartir recuerdos alrededor de un porrón, entonar canciones de la tierruca y jugar a la flor o al mus", hasta que en 1954 decidieron dar el siguiente y definitivo paso.
Buscaron un local y emprendieron la construcción de una bolera en una pequeña campa, para lo que les llegaron las 6.000 pesetas recaudadas a través de numerosas aportaciones de 25, 50 y 100 pesetas. El 16 de enero de 1955, a propuesta de Rómulo Martí Gutiérrez, un letrado de la Audiencia Territorial de Burgos, oriundo de Alceda, se fundó oficialmente la sociedad, compuesta entonces por trescientos socios.
Juan Carlos Ruiz, como otros presidentes de los centros de regular tamaño el de Burgos cuenta con ciento cuarenta socios, la mitad de ellos cántabros cree que el futuro es problemático. No se produce el relevo generacional y no existe tampoco un sentimiento claro de pertenencia a la tierra de origen, al tratarse de provincias limítrofes.
Dada esa cercanía, pide al Gobierno de Cantabria una mayor presencia física en los actos que organiza la Casa. "Para nosotros sería muy importante en todos los órdenes y apenas cuesta dinero". No oculta que el Centro Regional Montañés, como otros similares, sea cántabro o de otra autonomía, no atraviesa su mejor momento. "Estamos regular. La crisis nos golpeó con fuerza, algunos socios se dieron de baja y tuvimos que reducir sensiblemente las actividades. No podemos hacer tantas cosas como hacíamos antes". Espera, sin embargo, que la recuperación económica mejore también su situación.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.