Secciones
Servicios
Destacamos
J. martínez Teja
Viernes, 10 de febrero 2017, 20:45
Que una ciudad honre con un paseo largo y principalísimo y levante una escultura de gran porte en una zona privilegiada el parque de Mesones, en pleno Sardinero a un escritor nacido en Las Palmas de Gran Canaria, no sólo revela la talla intelectual y ... la importancia de la figura homenajeada sino el afecto y reconocimiento hacia quien está considerado como el mayor novelista español desde Cervantes. Fue a raíz de su amistad con Marcelino Menéndez Pelayo, fraguada en el Ateneo de Madrid, y con la lectura de las "Escenas montañesas" de José María de Pereda, cuando Benito Pérez Galdós, pues este es el personaje, se decidió a pasar los veranos en Santander para refugiarse de los calores madrileños. Uno de los trabajos presentados a los concursos literarios que organiza la Casa de Cantabria en Las Palmas llevaba por título, precisamente, "Pérez Galdós en Santander".
Fundación
12 de diciembre de 1984.
Dirección
Santa Juana de Arco, 46. 35004 Las Palmas.
Presidente
Miguel Dubreuil Expósito.
Número de socios
70 familias.
Cántabros en Las Palmas
1.600.
Instalaciones y actividades
Local de 140 metros cuadrados. Cuentan con piano, biblioteca, tenis de mesa, juegos de azar y una peque-ña cocina. Mantienen la escuela de bolos Modesto Cabello y un coro de dieciocho componentes, organizan exposiciones, concursos de tortillas, platos canarios y cocidos, de bolo palma, fotografía, literatura, pintura y postales de Navidad, celebran la Bien Aparecida y las Marzas y editan la revista Cántabros.
Teléfono
928 506 747.
Correo electrónico
casacantabrialaspalmas@hotmail.com
Benito Madariaga nos recuerda a este respecto que "Las Palmas fue su origen y la ciudad que incubó su pensamiento. En Madrid se desarrolló y se hizo nacional y Santander constituyó su cuartel de verano, donde se puso otra vez en relación con el mar y cuyo puerto fue el símbolo con Canarias de su proyección a Europa y América, al hacerse su obra universal". Galdós mandó construir un palacete en la finca "San Quintín", donde descansaba, trabajaba y mantenía reuniones con los intelectuales santanderinos. Muchas de sus creaciones estuvieron relacionadas con la capital cántabra, como "Doña Perfecta", "Gloria" o "Marianela", ciudad en la que el autor de "Fortunata y Jacinta" inició, en 1872, sus Episodios Nacionales.
La relación de Galdós con el lugar en el que nació su hija María, la amistad con Menéndez Pelayo, Pereda o Escalante hablando de Santander y de los montañeses confesó que "me será muy difícil ser completamente imparcial por el mucho cariño que tengo a este pueblo" es relevante, aunque no la única, porque existen otros vínculos personales de altura entre Las Palmas y Cantabria. Por ejemplo, Marta es bióloga, dibujante y "mujer de estilizadas fantasías" que siente predilección por la botánica y expone frecuentemente sus ilustraciones divulgativas realizadas con lápiz negro sobre papel. Su faceta artística pareciera inevitable porque su nombre completo es Marta Chirino Argenta, único fruto de la unión entre el palmense Martín Chirino, el escultor del viento, el hierro y la espiral, cuyas obras figuran en los principales museos del mundo, y Margarita, hija de Ataúlfo Argenta, el castreño universal, el maestro que dirigió en la Porticada de Santander el ciclo completo de las Sinfonías de Beethoven, con una ovación final del público, tras la conclusión de la Novena, que duró cerca de quince minutos. Uno de los grandes proyectos de la Casa de Cantabria es llevar a Las Palmas, la tierra de Chirino, la exposición de su suegro, "Argenta, una batuta centenaria", mostrada ya en Santander y en Castro Urdiales sobre el genio que estuvo a la altura de Karajan, Giuliani, Markievitch o Celibidache. Otro es la construcción de una bolera, ya prometida por el alcalde de Las Palmas.
Profesiones varias
La distancia entre Las Palmas y Santander es amplia, más de 2.200 kilómetros, y nunca hubo una emigración definida sino que, como en muchas ciudades o regiones españolas, la presencia de cántabros se debe a razones de trabajo, si bien no siempre relacionados con la hostelería en estas zonas de gran tradición turística, que acogen durante todos los meses del año a millones de visitantes, cual es el caso de las islas Canarias en su conjunto. Sí es cierto que grandes empresas de restauración estuvieron dirigidas por cántabros y que muchos de ellos encontraron en los fogones y en el sector servicios su presente y su futuro, pero otros vinieron para ejercer sus profesiones de abogado, ingeniero y profesor e incluso dirigieron el Puerto de la Luz y el aeropuerto de Las Palmas. El actual presidente de la Casa de Cantabria, Miguel Dubreuil, de cincuenta y seis años, comillano nacido en los mismos muelles, sabe bien lo que es salir de casa desde muy joven, pues a los catorce años estaba en Gijón estudiando en la Universidad Laboral, después anduvo por Alemania y Holanda y recorrió las Baleares y la mitad de la Península, la mayor parte del tiempo empleado en la hostelería, aunque trabajó también de hombre-todo. Después "conoces a alguien que conoce a alguien", y de esa forma llegó a Las Palmas "donde los inviernos son tan diferentes a los que tenemos en Comillas", se hizo con la concesión de una cafetería en un colegio de élite, se casó y se integró plenamente "en una ciudad alegre, bonita y acogedora donde, desde el principio, me sentí como en casa".
Anecdotario
La jornada mayor de la Casa es la de la Patrona de Cantabria, la Bien Aparecida, fiesta en la que concentran los mejores medios e ilusiones, celebran una misa, cantan coros cántabros y agrupaciones canarias, hay un torneo bolístico, tiro a la rana, vienen las autoridades y tiene lugar un almuerzo muy concurrido al sol que nunca falta. Entre una cosa y otra, un pregonero abre el día grande, y cuando icieron el honor de llamarme les hablé de nuestra Virgen chicuca, la más pequeña de todas, apenas 21 centímetros de altura, aunque no cité a la Patrona del Archipiélago vista la polémica entre Las Palmas y Tenerife sobre si es la Virgen del Pino o la Candelaria. No hay problema para los cántabros de la isla la Aparecida y la del Pino en Gran Canaria y la Aparecida y la Candelaria en Tenerife.
Las Palmas, con más de quinientos años de historia, está abierta al turismo y a un mar "por el que llegaron los viajeros y los pobladores que han ido conformando la imagen abierta y amable de los palmenses. Castellanos, flamencos, genoveses y portugueses buscaron aquí tierras libres para asentarse. Las Palmas de Gran Canaria es un crisol de razas y culturas, una sociedad cosmopolita", en la que la creación de la Casa de Cantabria, va a hacer treinta y tres años, vino como consecuencia de la celebración de una cena de hermandad entre un grupo de montañeses en el comedor del Centro Gallego. Los impulsores del proyecto elaboraron unos estatutos inspirándose en los de la Casa de Cantabria de Madrid. El centro comenzó a andar, montando sus primeras operaciones en una oficina del número 50 de la calle Presidente Alvear, y los socios eligieron a Álvaro Flórez-Estrada como su primer responsable. Después, la sede estuvo en la calle Martínez de Escobar, antes de encontrar acomodo en Franchy i Roca y ahora en Santa Juana de Arco.
Pasado y futuro
Volver la vista atrás también es rememorar la edición trimestral de publicaciones como "Noticias de la tierruca", más tarde "El Pasiegu" y posteriormente "Cántabros", que permanece; la instalación de una bolera en Telde, la acción del siempre recordado presidente Roque Quintana, pionero, gran impulsor y principal conseguidor el popular humorista Manolo Vieira, que había sido camarero de Roque, prestó su sala de fiestas La Chistera para su multitudinario homenaje y los reconocimientos que el centro ha rendido a montañeses destacados en el deporte, como José Manuel Abascal, Severiano Ballesteros y Óscar Freire o a distintos grupos en sus desplazamientos a Las Palmas, del modo que ha ocurrido con la primera plantilla del Racing, en Primera o en Segunda, o con equipos de voleibol o balonmano que aquí venían a disputar sus encuentros oficiales.
"Uno tiene que tirar del carro y el resto acompaña". La frase de Dubreuil, referida a la Casa de Cantabria de Las Palmas, pudiera ser aplicable a muchos otras sociedades regionales de similar estructura y tamaño, pero asegura también que "siempre se cuenta con siete y ocho personas alrededor que ayudan en lo que se les pide". Aunque no lleva mucho tiempo en el cargo, una de sus primeras decisiones fue la del cambio de sede, dejando la anterior, situada en la calle de los bancos, porque no estaba conforme con las condiciones de alquiler. La Casa ocupa ahora lo que fuera un antiguo garaje en el que están bien, según el presidente, "ya que la anterior situación era insostenible económicamente". Miguel Dubreuil echa de menos de Cantabria "a mi padre y el verde de los prados" y no siente ninguna preocupación por el futuro de la Casa. "Siempre que el Gobierno regional nos siga considerando una embajada y no nos falte su ayuda, aquí seguiremos".
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.