Cospedal cita hoy a Diego y Buruaga en Génova para atajar el conflicto por el liderazgo del PP

Lo que es evidente es que ambos dirigentes llegan a Madrid en un ambiente muy enrarecido.Y es que pese a que desde Génova se había pedido discreción y se había catalogado este encuentro como privado o interno, la convocatoria de la reunión ha sido vox populi entre los dirigentes populares en los últimos días. Diego ya lo comentó con los alcaldes pasiegos y campurrianos, además de con sus personas más cercanas, durante los encuentros que celebró esta misma semana en busca de apoyos para armar una candidatura alternativa a la de Sáenz de Buruaga.

Aún así, pocos más detalles han transcendido del cónclave, aunque todo apunta a que será por la tarde ya que María Dolores de Cospedal deberá asistir por la mañana, en su calidad de responsable de la cartera de Defensa, a la reunión que el consejo de ministros celebra todos los viernes bajo la presidencia de Rajoy.

Lo que está claro, tal y como reconocieron los dirigentes del PP tras el Congreso nacional que tuvo lugar este fin de semana en Madrid, es que Génova no quiere un "choque de trenes" y demanda acuerdos entre los diferentes sectores del partido a nivel regional para constituir una candidatura única. Sin embargo, las jornadas catárticas, en pleno periodo de encaje de piezas, por la convulsión generada por las críticas de Eduardo Van den Eynde a Sáenz de Buruaga, han agitado el ambiente. Mucho más tras el posterior anuncio de la secretaria general de que optaba a liderar el partido. El PP cántabro está pues a la espera de las decisiones de Madrid y sobre todo preocupado por si finalmente no se logra convencer a ambos dirigentes y constituir una única candidatura que evite la guerra interna.

Mientras tanto, los dos sectores siguen con su estrategia en busca de apoyos. María José Sáenz de Buruaga almorzó ayer en Hoznayo con alcaldes y dirigentes del PP de la zona de Trasmiera. Ignacio Diego, acompañado por el exdiputado regional Carlos Bedia, se reunió a mediodía con el exalcalde de Riotuerto, Ángel Cuadrado, que lleva meses pidiendo un cambio de ideas y de caras y que, entre amagos de presentar una candidatura propia, se deja querer por ambos sectores. Precisament ayer, Cuadrado volvió a salir a la escena pública después de ocho meses de silencio con un nuevo mensaje: "Necesitamos unidad ante todo. Pero no solo de boquilla".

El Parlamento de Cantabria fue ayer escenario de los movimientos internos en el PP. A los diputados regionales que participaban en una comisión sobre presupuestos, se sumaron después los citados Carlos Bedia y Ángel Cuadrado, además de los senadores Blanca Martínez y Javier Fernández (todos ellos afines a Ignacio Diego) y el delegado del Gobierno, Samuel Ruiz. "No es habitual tanto movimiento", dijo con sorna un diputado socialista.

Al tiempo, varios dirigentes populares se han ido descartando para encabezar una posible lista de unidad. El primero que alzó la voz fue el alcalde de Arnuero y vicesecretario, José Manuel Igual. Después se se han sumado Santiago Recio, María Luisa Peón o Enrique Bretones.

Firmar la paz

Pero todos los ojos estarán hoy pendientes de lo que suceda en la capital. Madrid quiere huir a toda costa de los "líos" y buscará "el acuerdo y el consenso" para armar una "candidatura de unidad en Cantabria", repitieron como un mantra desde Génova el pasado domingo. "Si es posible nos gustaría que buscaran un consenso previo, sería lo mejor y lo más deseable", explicaron a este periódico fuentes de la cúpula nacional. Aunque prefirieron no pronunciarse sobre sus preferencias, a nadie se le escapó la conversación entre Juan Carlos Vera, un fontanero del partido con hilo directo con Mariano Rajoy (quien le acaba de ratificar como coordinador del Comité de Dirección del PP), con Sáenz Buruaga. Fuentes del PP también recuerdan las reuniones que celebró Diego con la cúpula, además de su conversación del pasado viernes con Cospedal sobre el mismo escenario del congreso nacional.

En todo caso, la mayoría de los dirigentes consultados por este periódico apuestan en privado por "una única lista encabezada por Sáenz de Buruaga y que integre en la futura dirección a personas que son cercanas a Diego". El motivo que esgrimen es que "el propio presidente está buscando una candidato que no sea él para la lista que promueve". Un diputado sí reconoció que a Diego le había "molestado" que su número dos anunciara su candidatura sin esperar a la reunión con Cospedal. Ella, en cambio, dijo que daba el paso al frente porque tenía "el visto bueno" de Madrid.