Reunión clave en Madrid para el futuro del PP cántabro

Todas las miradas del PP cántabro estarán puestas hoy en la sede de Génova. La reunión que mantendrán Ignacio Diego y María José Sáenz de Buruaga con María Dolores de Cospedal y Fernando Martínez Maillo decidirá el futuro más inmediato de los populares.

De ese encuentro dependerá si ambas facciones mantienen su enfrentamiento y el partido llega fraccionado al congreso del próximo 25 de marzo. O si, finalmente, se acepta la propuesta de una «lista integradora» de la dirección nacional y que Diego hizo suya este fin de semana en una carta pública a militantes, simpatizantes y votantes. Buruaga no quiso entrar a valorar esa misiva del todavía presidente del PP cántabro para respetar el pacto de silencio que Madrid les pidió a ambos.

La tensión con la que se desarrolló la primera reunión, celebrada el pasado viernes, en la que no se llegó a ningún punto de encuentro, deja abiertas todas las posibilidades. Incluso, existen opciones más o menos serias de que se presenten uno o dos listas más durante esta semana, a modo de tercera vía frente a la división de la cúpula autonómica.

Mientras Sáenz de Buruaga sostiene que las bases la vinieron a buscar; en el entorno de Ignacio Diego, lo ven como una traición. De hecho, los entornos más cercanos de ambos dirigentes ya han empezado a moverse para recabar apoyos. Desde el equipo de la secretaria general, por ejemplo, aseguran que ya cuentan con un millar de avales. La dirección nacional todavía confía en que los problemas internos puedan reconducirse antes del 1 de marzo, fecha en que deben estar presentadas todas las candidaturas, y haya una única lista.