Hasta 252 agresiones sufrió el personal sanitario el año pasado en Cantabria «y van a más»

Sólo el año pasado la Consejería contabilizó hasta 252 casos: el 90% de ellos fueron agresiones verbales, el 70% tuvieron como víctimas a mujeres y el 80% se localizaron en el ámbito de la Atención Primaria. Son algunos de los datos que ha aportado el consejero, Raúl Pesquera, presente en la concentración, en la que se han dado cita representantes de los once colegios profesionales que integran el Foro Sanitario: el de Odontólogos y Estomatólogos, que asume actualmente la presidencia rotatoria de la organización, y los de Enfermería, Farmacéuticos, Fisioterapeutas, Médicos, Ópticos, Podólogos, Psicólogos, Veterinarios, Logopedas y Nutricionistas Dietistas–.

También ha participado el presidente del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, el cántabro Tomás Cobo, que ha recordado el informe publicado ayer que sitúa a Cantabria como la segunda comunidad de España con un índice más alto de agresiones a facultativos (7,56 ataques por cada mil habitantes, con 30 casos registrados), sólo por detrás de Cataluña.

Pero el alcance de «esta lacra», en forma de insultos, amenazas, empujones y gritos, llega a todas las categorías profesionales que trabajan en la sanidad. Enfermeras, celadores, auxiliares... incluso el personal administrativo, que con frecuencia representa el primer contacto con los usuarios. «Creo que el covid nos ha trastornado a todos un poco, estamos nerviosos», ha opinado José del Piñal, presidente de los Odontólogos y del Foro Sanitario de Cantabria, que ha puesto de relieve la necesidad de «visibilizar y concienciar» a las administraciones públicas, a los ciudadanos y a los pacientes sobre la magnitud de este problema, que «va a más» y que «no puede justificarse en ninguna circunstancia».

«Reivindicamos el fin de las agresiones a personal sanitario, un problema que está in crescendo de forma tremenda. El año pasado se registraron aproximadamente un 50% más de casos que el anterior, pese a que se están tomando medidas y contamos con la colaboración de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Se han puesto guardias de seguridad en los centros más conflictivos, ya hay un concurso para instalar cámaras de vigilancia en todos los centros de salud, pero aún así van en aumento, y tal vez sea más un problema de concienciación y de educación de la sociedad», ha añadido Del Piñal.

El consejero de Sanidad, por su parte, ha incidido en que es «un tema que nos preocupa. Es cierto que desde que tuvimos la agresión tan brutal en Los Castros hemos puesto el foco en este problema, se han facilitado los cauces de denuncia y están aumentando el número de denuncias que se realizan, al tiempo que hemos incorporado seguridad activa en algunos centros y acabamos de sacar a licitación las cámaras de vigilancia que se instalarán en todos los centros de salud y consultorios». Hasta 250. Y ha recordado que las agresiones tienen repercusión administrativa. No en vano, Sanidad ya ha notificado las siete primeras multas de 3.000 euros por agresiones a personal del SCS. «Esto es una lacra que tenemos que combatir entre todos», ha señalado Pesquera. Un mensaje que comparte el Sindicato Médico, que añade que «la forma de erradicarlo es con educación, concienciación y sanción».