«Acusado descenso» del número de menores extranjeros no acompañados

Los datos muestran un descenso acusado de ingresos que han pasado de 123 en 2021 a tan solo 37 en 2022, lo que ha dado lugar al cierre en agosto de uno de los centros de acogida, el denominado El Fresno, situado en Santander. «Como valoración sumamente positiva podemos decir que el perfil de los jóvenes migrantes no acompañados ha cambiado en nuestra Comunidad con muy baja conflictividad durante todo el año tanto dentro como fuera de los recursos residenciales de forma que, al cierre del año, de los 28 jóvenes atendidos tan solo uno se encuentra en situación de fuga con actividades delictivas».

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La Fiscalía cántabra no puede dejar de analizar el impacto que la invasión militar de Ucrania por parte de Rusia ha tenido en este apartado, destacando la «pronta y adecuada coordinación» que se ha dado desde el principio entre Fiscalía de Menores, el Icass y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, a partir de la reunión celebrada en la sede de la Delegación del Gobierno de Cantabria el 5 de abril, para fijar pautas de actuación conjunta. «Se debe destacar la eficaz y pronta respuesta dada desde la Brigada Provincial de Extranjería a la afluencia de familias en los primeros meses del conflicto tramitándose muy ágilmente las solicitudes de Protección Temporal para todos los ciudadanos ucranianos a fin de garantizar poder acceder a todos los servicios que la Administración pudiera proporcionarles con la máxima cobertura», apunta la fiscal delegada del área.

De todas esas fichas abiertas por la Brigada de Extranjería se daba traslado a la Fiscalía de Menores, que abrió un registro propio, siendo un total de 125 los menores que llegaron a Cantabria, de los que tan solo dos tuvieron la consideración de Menas al no venir acompañados de ningún progenitor, tutor o adulto responsable siendo trasladados por un breve espacio de tiempo a centros de protección para, posteriormente, regresar a su país por reagrupación familiar en fechas de 13 de abril y 21 de octubre de 2022, respectivamente. «En ningún caso se detectaron situaciones de riesgo para los menores ucranianos que llegaron a nuestra Comunidad», aclara Irene Ciriza.

Con relación a la Red de Centros de Menores de Cantabria en Protección, además de los cambios en lo relativo a centros MENA, la fiscal valora positivamente el funcionamiento en su nueva ubicación del Centro de Atención a la Infancia y la Familia (CAIF) desde el 28 de febrero, con una dotación de entre 8 y 10 plazas en unas dependencias formadas por dos casas unifamiliares más idóneas para su función.

Por otro lado, la fiscal delegada del área de menores hace referencia en su balance del año 2022 a la medidas cautelares ejecutadas, que ascendieron a 13 (frente a 17 en 2021) de las que tres consistieron en internamiento cerrado, cinco de internamiento semiabierto, cuatro de libertad vigilada y una de convivencia en grupo educativo, en cuanto a medidas ejecutadas por la Entidad Pública. «Deben añadirse las medidas cautelares ejecutadas directamente por el Juzgado de Menores, que serían los seis supuestos de alejamiento y prohibición de comunicación».