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Alberto II de Mónaco ya ha aterrizado en Santander para comenzar su visita a Cantabria, una parada que se enmarca dentro de una gira por España y Portugal y que tendrá como epicentro el municipio de Puente Viesgo, donde su tatarabuelo, Alberto I, se encargó de financiar las primeras campañas de investigación ... de las cuevas de Monte Castillo, declaradas Patrimonio de la Humanidad. De hecho, el recorrido del soberano monegasco por la península Ibérica se produce con motivo del centenario de la muerte en 1922 de su antepasado.
El príncipe Grimaldi pasará alrededor de 24 horas en Cantabria. Ha llegado este sábado, a las 18.30 horas, al aeropuerto Seve Ballesteros, procedente de Madrid. En la pista de aterrizaje le esperaba el presidente regional, Miguel Ángel Revilla, que se encargó de dar la bienvenida a Alberto II, que tendrá el resto de la tarde liberada y sin agenda oficial.
Quien se encuentre esa tarde paseando por Puente Viesgo podría encontrarse con el soberano, porque tiene una habitación reservada en el Hotel Palacio de Helguera de Las Presillas. El inmueble histórico, que se convirtió recientemente en un alojamiento «exclusivo» de cinco estrellas, está decorado por la prestigiosa decoradora Malales Martínez Canut.
Alberto II se volverá a encontrar con las autoridades cántabras ya en la jornada del domingo. El presidente Revilla y el vicepresidente regional, Pablo Zuloaga, recibirán al soberano a las 10.30 horas en el futuro Centro de Arte Rupestre de Puente Viesgo, cuyas obras avanzan a buen ritmo. En agradecimiento al papel que tuvo el tatarabuelo del soberano a las investigaciones rupestre y a su difusión mundial, el Gobierno de Cantabria pondrá el nombre de Alberto I a este espacio de divulgación.
Allí estarán una hora y después serán trasladados a las cuevas del Castillo (11.30 horas), donde tras una explicación histórica y científica el soberano descubrirá una placa conmemorativa antes de entrar en la cueva junto a un grupo reducido de expertos y autoridades. No será su primera experiencia en esta cavidad, pues ya la visitó, también junto a Revilla, en 2010. A la salida, todos ellos volverán a ponerse el traje y la corbata para asistir a una comida en el Hotel Balneario de Puente Viesgo.
El soberano monegasco, que el pasado julio giró una visita al yacimiento de Atapuerca (Burgos), recaló el jueves en Portugal, donde visitó el archipiélago de las Azores, situado en medio del océano Atlántico a camino entre Europa y América. Allí inauguró una exposición en homenaje a su antepasado y se reunió con el presidente de esa región, José Manuel Bolieiro. Hoy, viernes, ya en Lisboa, Alberto II será recibido por el jefe del Estado portugués, Marcelo Rebelo de Sousa. En la capital lusa inaugurará una ex posición en el Museo de la Marina de Lisboa para rendir tributo a la amistad entre dos soberanos amantes de los océanos: Alberto I (1848-1922) y el rey Carlos I de Portugal (1863-1908), cuyo asesinato a tiros el 1 de febrero de 1908 en pleno centro de Lisboa fue el preludio del fin de la monarquía lusa (1910).
El soberano de Mónaco terminará su gira el fin de semana en España. En Madrid, se recordarán los lazos de su tatarabuelo con la Marina Real Española y con el naturalista Odón de Buen (1863-1945) y se descubrirá una placa conmemorativa sobre Alberto I destinada al Instituto Español de Oceanografía. En la capital española, sin embargo, no tiene previsto encuentros ni con el Rey Felipe VI ni con ningún miembro del Gobierno español.
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