Anuario de Cantabria, el relato de doce meses marcados por la pandemia

El año que nos cambió la vida empezó con una sospecha que llegaba desde China. En enero de 2020, los titulares mencionaban una extraña neumonía. Era la sospecha de que algo pasaba lejos, pero en las páginas de El Diario Montañés, esa lejanía se advertía como un aviso elocuente. Desde entonces han pasado cientos de titulares, fotografías y hechos, tragedias y esperanza, aplausos, arco iris y trabajadores de todos los sectores implicados, médicos doblados de rodillas de cansancio, de miedo, pero también triunfales por haber salvado otra vida. ¿Es posible contener en un libro lo que nos ha pasado en la pandemia? ¿Cabe el año que ha pasado Cantabria en una publicación? Al menos su esencia ha quedado narrada en las 300 páginas que conforman el Anuario de Cantabria 2020, que ya está a la venta en todos los quioscos y puntos de venta habituales de la región.

Cuando en marzo del pasado año la pandemia nos encerró en casa, los medios de comunicación se alzaron como un servicio esencial, y en ese trabajo de contar la extrañeza y el temor, surgió todo el material que ahora este periódico recoge en su tradicional publicación, que suma ya 36 ediciones, y que vuelve a los lectores con la intención de recopilar y homenajear, de conmemorar y comprender lo que nos ha sucedido como sociedad. Todo ha cambiado: incluso el propio Anuario, que ve la luz con un diseño renovado, tanto su estructura informativa (servida ahora por meses), hasta el diseño, pasando por una apuesta gráfica en la que las imágenes ganan peso en cuanto a número y tamaño: 250 instantáneas que activan el recuerdo de la solidaridad, el esfuerzo, la crisis económica, el dolor, el reencuentro, la recuperación, las primeras vacunas, la esperanza.

El testimonio del año que nos cambió la vida está narrado por sesenta periodistas y colaboradores, corresponsales, fotógrafos: todas las voces del equipo humano que conforma El Diario Montañés relatan y analizan, junto con voces de la Universidad de Cantabria, lo sucedido en un año de pandemia mundial, que sigue cobrándose vidas humanas y aumentando la crisis económica, pero que también ha dejado escenas de solidaridad y compromiso demostrado por numerosos colectivos profesionales, empezando por el sanitario, y un sinfín de héroes anónimos.

El año covid está contado desde el ámbito sanitario, político, económico, social, cultural, deportivo; una realidad que el dibujante Ansola también plasma en una gran viñeta y que se completa con la inclusión de algunas de las primeras páginas más impactantes del periódico. Además, como cada edición, desde 1985, un artista cántabro pone identidad a la portada del Anuario. Como hicieron en su día Juan Uslé, José Hierro, Pilar Cossío, Okuda o Sara Huete, este año lo hace el pintor, arquitecto y escultor cántabro Juan Navarro Baldeweg con el óleo sobre tela 'Ser de agua I'.

También era tradicional la gala de presentación del Anuario, si bien la del año pasado se suspendió por el confinamiento, en esta edición el Palacio de Festivales acogió el jueves un evento de aforo limitado; allí se entregaron los premios 'Cántabro del año 2020', en representación de toda la ciudadanía, a seis profesionales de sectores clave durante la pandemia; y el pendiente de 2019, a los propietarios del restaurante Cenador de Amós, tres estrellas Michelin.

• Temas
• Okuda
• El Diario Montañes
• Universidad de Cantabria
• Michelin
• Cantabria
• China
• libro
• periódico
• Periodismo
• COVID-19