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El apoyo de PNV y Junts en el Congreso que permite iniciar la tramitación de la proposición de ley del Partido Popular para que el lobo deje de ser especie protegida al norte del Duero, ha coincidido con el anuncio de la salida de Teresa ... Ribera del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico para poner rumbo a Europa, encabezando la lista del PSOE a las elecciones. Son dos circunstancias que abren una nuevo escenario en la batalla que Cantabria y las demás comunidades más castigadas por los ataques del lobo mantienen con el Gobierno central en su intento de rebajar la protección a esta especie y permitir el control de sus poblaciones, trasladando la demanda desesperada del sector ganadero. El debate de la cuestión en la Cámara Baja, donde, teóricamente, mantendría esa mayoría que ha hecho posible que llegue hasta allí –con PP, Vox, PNV y Junts–, sumado a la marcha de Ribera, que se ha opuesto enérgicamentedesde el Ministerio a permitir la caza del depredador, puede dar un vuelco a la situación.
No obstante, haber salvado el primer obstáculo para que la Cámara decida si debe haber cambios en el estatus de la especie no quiere decir que a partir de ahora el camino para conseguirlo vaya a ser fácil. La siguiente barrera a superar será la de la Mesa del Congreso, el órgano que se encarga de calificar todas las iniciativas parlamentarias, declarar su admisibilidad y fijar el calendario de actividades del Pleno y de las comisiones. Dicho de otro modo, puede –con la mayoría de PSOE y Sumar–, retrasar de forma casi indefinida la llegada de la proposición de ley de los populares al Parlamento.
Félix de las Cuevas, diputado nacional por Cantabria del Partido Popular, se mostró optimista y confiado en que, «en unos meses» los congresistas puedan debatirla. «Esperemos que el PSOE y la Mesa del Congreso, con mayoría de izquierdas, no paralice el procedimiento». «En tres semanas no tenemos plenos, después llega el periodo de mayo y junio y, después, hasta mediados de septiembre no vuelve a haber actividad parlamentaria: esperemos que para entonces ya esté encima de la mesa. Nosotros vamos a hacer todo lo posible para que el tema se aborde cuanto antes, porque es una necesidad para Cantabria y para los ganaderos».
De las Cuevas reconoció, no obstante, que aún queda mucho camino por recorrer. «Lo que se ha aprobado es la toma en consideración, y ahora tiene que empezar todo el trámite del texto, de enmiendas y la aprobación definitiva. Esto puede alargarse en el tiempo, pero estamos muy contentos: sacar al lobo del Lespre (Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial), es un compromiso de Feijóo y de Buruaga con Cantabria».
Mucho más breve fue el comentario del diputado socialista cántabro Pedro Casares, quien, junto a su compañera Noelia Cobo, votó en contra de que se tomase en cuenta la propuesta del PP –curiosamente, Cobo votó a favor de sacarlo del Lespre en el Parlamnento cántabro–. «Apostamos por un nuevo modelo que se base en la coexistencia entre el lobo y la ganadería extensiva», se limitó a decir.
La batalla del Gobierno cántabro contra el lobo se intensificó la pasada semana con la participación de la presidenta, María José Sáenz de Buruaga, en el Comité de las Regiones en Bruselas, donde denunció que la «excesiva protección del lobo» en España supone una «amenaza» para la ganadería de la región y añadió que, desde la inclusión de la especie en el Lespre, los ataques al ganado han aumentado el 113%. También la pasada semana, el consejero de Desarrollo Rural y Ganadería, Pablo Palencia, mantuvo una reunión con el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, en la que volvió a insistir en la necesidad de controlar la población de lobos, una petición que desoyó de nuevo el Ministerio, que argumenta además que Cantabria tiene todavía pendiente presentar un censo regional, una tarea que ya ha realizado el Principado de Asturias –otra de las áreas más afectadas por los ataques–, y en la que Castilla y León –igualmente castigada por el lobo–, ha avanzado tras sacar a licitación la asistencia técnica para el apoyo en la coordinación y análisis de la información del censo regional de la especie para este año y el que viene. Además, según los datos aportados por Asturias, el año pasado había 43 manadas y 39 camadas en esa comunidad, exactamente las mismas que en el año 2021, cuando el lobo pasó a estar protegido.
El diputado regional del PRC Guillermo Blanco, al frente de la Consejería de Ganadería la pasada legislatura, celebró la llegada de la cuestión del lobo al Congreso. «Creo que es bueno que se haya llevado y puede llevarnos a una salida del Lespre antes incluso de que se produzca un cambio de Gobierno, pero llevará tiempo», auguró.
Según Blanco, muy combativo frente al lobo en su etapa como responsable de Ganadería, fue él mismo quien indicó al PP en el Parlamento regional la senda a seguir para lograr que el Congreso debata sobre su protección: «Presentarlo a instancias del Senado y llevar al Congreso iniciativas que obliguen al Gobierno». «Esto coincide en el tiempo con una propuesta que hacemos desde el PRC al Parlamento hace dos meses en la que instamos al Gobierno regional a presentar en el Senado, donde el PP tiene mayoría absoluta, esa proposición. Diez días después, el senador Juan Carlos García, alcalde de Vega de Pas, lo defiende en la Cámara Alta. Esto es una gran suerte y es de agradecer que se haya conseguido».
También celebró Blanco en sus redes sociales el relevo de Ribera en el Ministerio: «Al medio rural, al menos de las cuatro CC AA loberas de España, le has hecho mucho daño… y lo sabes. Por parte de Cantabria espero que tengas el resultado que mereces!!!».
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