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La tan ansiada y trabada autopista entre Burgos y Aguilar de Campoo, la A-73, que permitirá a Cantabria la salida directa hacia Madrid por carretera, revive con la adjudicación de un nuevo tramo. El Ministerio de Transportes encargó recientemente a la UTE (Unión ... Temporal de Empresas) formada por FCC y Construcción y Obras Llorente la construcción del enlace entre Quintanaortuño y Montorio, de 11,6 kilómetros de longitud y que, si los planes del Gobierno salen bien, estará ya en obras en el mes de septiembre, aunque habrá que esperar 36 meses para que esté concluido después de la última actualización de plazos. La oferta de FCC y Llorente ha sido la más ventajosa de las 13 que se presentaron a la licitación de la obra gracias al montante económico presupuestado por esta UTE: 89,4 millones de euros, 15,4 menos que los 104,8 por los que Transportes sacó a concurso las obras. Una adjudicación que permitirá, por fin, que las máquinas vuelvan a actuar sobre esta autopista que no hace otra cosa que sufrir retraso tras retraso. Aunque en este enlace sí hay que aplaudir la diligencia del Ministerio de Raquel Sánchez que, en tan solo tres meses, ha sido capaz de cumplir todos los trámites previos al inicio de la obra: el mismo 1 de enero el Ministerio publicaba la licitación del tramo, en abril la mesa de contratación hacía la selección y, en mayo, el Ministerio lo ha adjudicado.
El tramo ahora encargado enlazará con los dos más próximos a Burgos y que ya están ejecutados: Burgos norte-Quintanilla de Vivar y Quintanilla de Vivar-Quintanaortuño. El trazado se iniciará en el enlace de Quintanaortuño, dando continuidad al tramo en servicio de la A-73, variante de Quintanilla de Vivar-Quintanaortuño, y discurre separándose de la carretera N-627 hacia el noroeste, alejándose del núcleo urbano de Ubierna. Se ha proyectado un viaducto sobre el río Ubierna, varios pasos superiores e inferiores y un ecoducto y, en aras de minimizar el impacto ambiental, se ha ajustado el trazado de la autovía hacia la vertiente oeste, minimizando el volumen de material excavado.
Hay que recordar que de los siete tramos en los que se divide la A-73 solo hay tres que están finalizados (Burgos norte-Quintanilla Vivar, Quintanilla Vivar-Quintanaortuño y Pedrosa de Valdelucio-Báscones de Valdivia); uno listo para iniciar las obras (Quintanaortuño-Montorio); dos pendientes de licitar las obras (Montorio-Santa Cruz del Tozo y Santa Cruz del Tozo-Pedrosa de Valdelucio) y uno que, incluso, está pendiente de su actualización (Báscones de Valdivia-Aguilar de Campoo). Este último tramo es en el que más ha incidido al Ministerio el Gobierno de Cantabria dado que permitiría, al menos, finalizar la salida desde Aguilar.
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