Buruaga cierra filas con Sáenz de Santamaría

«He decidido respetar el voto de la mayoría de los afiliados de la región -se impuso Sáenz de Santamaría con el 53% de los apoyos-, teniendo en cuenta la solvencia y la capacidad que va a tener el próximo candidato a presidir el Gobierno central y el papel que puede jugar alguien como Íñigo de la Serna en la nueva dirección», detalló Buruaga. A pesar de su apoyo explícito, que se suma al de Gema Igual y el propio De la Serna, confió en que Cantabria mantenga al menos su poder territorial gane quien gane.

«Los dos son muy buenos candidatos», reiteró Sáenz de Buruaga, pero «es muy importante en términos de confianza el plus que puede dar alguien como Íñigo de la Serna», sentenció antes de abandonar el congreso.

Ella, así como otros miembros de la dirección, miran de reojo al exministro de Fomento, al que ven en lo más alto de la dirección nacional. Hay quien apuesta a que se disputará la Secretaría General con Alfonso Alonso, el líder de los populares vascos, tendrá una portavocía o una vicesecretaría si la exvicepresidenta vence mañana. La portavoz de la candidatura de la vicepresidenta en la región, María Luisa Peón, calcula que tiene el apoyo del 75% de los 55 compromisarios.

Ante esta perspectiva, De la Serna echó el resto por Sáenz de Santamaría a su llegada al cónclave. Insistió en que cuenta con un respaldo «extraordinario» y unos apoyos «muy importante» para presidir el PP y aseguró que él ha formado parte del equipo que la avaló «desde el principio». El exalcalde de Santander, que arropó a su candidata a la entrada, calificó a Sáenz de Santamaría como una «persona extraordinaria» por su «capacidad, experiencia y gestión». «Es una mujer que ha demostrado desde la oposición cómo se puede hacer una oposición dura y desde el Gobierno cómo se pueden gestionar situaciones enormemente difíciles con gran solvencia», insistió.

Desde la candidatura del exvicesecretario de Comunicación, Juan Corro se mostró «muy optimista» y confió en que se impondrán en el conclave interno. Ellos confían en que existe un alto porcentaje de voto oculto entre los compromisarios, ya que es secreto, y que sacarán más apoyos cántabros de los que creen sus rivales. El equipo de Casado también apunta a que Cantabria mantendrá al menos el peso que tiene ahora en la dirección nacional y, en el mejor de los casos, podrá ganar algo más. Los mejor posicionados son el propio Corro, que fue jefe de gabinete de Víctor Calvo Sotelo en la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones con Rajoy, y el vicesecretario de Estrategia y Acción Política y exalcalde de Camargo, Diego Movellán, que es amigo personal del candidato y uno de sus valedores en la región. Se da por seguro que uno de ellos entrará en la Junta Directiva Nacional en sustitución del diputado José Manuel Igual.

El PP cántabro da por hecho que Casado tendrá el apoyo de todos los compromisarios cercanos al expresidente Ignacio Diego. A los senadores Blanca Martínez, Javier Fernández y Esther Merino se suman los delegados de Los Corrales, de Cabezón y el del Besaya. Al margen cuenta con los de Camargo, Castro Urdiales y Reinosa, donde Casado se impuso con claridad en la primera fase de las primarias.

El congreso arrancó tranquilo y con el nombramiento del alcalde de Selaya, Cándido Cobo, como vocal de la mesa que lo dirige. El momento cumbre llegó con el discurso de Rajoy donde ni Sáenz de Buruaga ni la secretaria autonómica, María José González Revuelta, pudieron contener las lágrimas de emoción. Sáenz de Buruaga agradeció al expresidente el papel que ha jugado en España.