Buruaga será la única candidata a presidir al PP, con el doble de avales que hace cinco años

Los aspirantes tenían hasta este martes a las 20.00 horas para presentar los avales de los afiliados para formalizar su candidatura y, como se daba por seguro en los últimos días, Sáenz de Buruaga fue la única que se presentó con los papeles en la sede de Joaquín Costa. Las condiciones eran mínimas:reunir 90 avales sobre una militancia de cerca de 14.000 personas, pero solo la actual presidenta del partido los entregó. En concreto, 2.404. «Siento una enorme gratitud por la confianza que los verdaderos dueños y protagonistas de este proyecto, que son sus afiliadso, están depositando en mí. Esa fuerza y confianza que me vuelven a dar hoy tengo que devolvérsela en forma de trabajo, ilusión y muchísima responsabilidad», aseguró.

A partir de ahí, Buruaga repitió dos mensajes que viene subrayando en los últimos días: el de la apertura del partido a los cargos y militantes que en esta legislatura interna han sido críticos a su gestión y el de que a las primarias del PP serán el primer paso para que la formación conservadora recupere Peña Herbosa a partir de las elecciones de mayo del año que viene. Todo resumido en una frase:«Eso es lo que yo les ofrezco (a la militancia), contar con todos ellos para hacer un partido más abierto, más ancho, más plural, más cohesionado y cumplir el objetivo que legítimamente compartimos de ganar para gobernar».

Por esa línea va también el lema de su candidatura, 'Preparados por Cantabria'. Candidatura que no tendrá una alternativa en frente. En cualquier caso, los militantes sí tendrán que acudir a las urnas. Lo harán el próximo 27 de septiembre para elegir a los más de 900 compromisarios que participarán en el congreso autonómico del PP. Quienes quieran aspirar a un asiento tienen hasta el día 22 para inscribirse.

Los 2.404 avales de Buruaga superan los 1.250 que sumó ella misma en la pugna contra Ignacio Diego, que en aquella ocasión reunió 900. En la dirección del PP entienden que este dato demuestra la «ilusión» que genera un proceso que ha movilizado a un gran número de afiliados. Algo más complejo en un contexto en el que, sin confrontación interna, había poco en juego.