El calor llega a toda la región a finales de julio tras un mes escasamente veraniego

Aunque las previsiones anunciaban que el verano sería más cálido y soleado de lo normal, tanto el final de junio como lo que va de julio se han encargado de arruinar los pronósticos. Se han registrado menos horas de sol y más lluvias. Sólo en la recta final, cuando el resto del país ha superado su segunda ola de calor, el tiempo veraniego ha desperezado en Cantabria. El domingo fue para muchas familias el primer día completo de playa. La localidad de Polientes, en el municipio de Valderredible, marcó la temperatura más alta de todo el verano, con sus 37,º1. Este lunes la ha vuelto a superar, (38,1º, también la máxima regional). Son numerosos los puntos donde ha apretado la canícula. Diez de los 22 estaciones de medición de la Aemet han superado los 30º. Tras Polientes, los lugares más calurosos han estado en Tama (Cillorigo de Liébana) 37,4º y Cubillo del Ebro (Valderredible) 37,3º. Además, la región vivió del domingo al lunes una noche tropical con los termómetros por encima de los 23º. De hecho, en San Roque de Riomiera alcanzaron los 27,1 grados centígrados, 26 en Tresviso o 25 en Alto Campoo.

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Este martes será «probablemente –según apunta Arcadio Blasco, delegado territorial de la Aemet– el día más cálido de todo el verano, sobre todo en el litoral». Toda la región está en aviso amarillo. Aunque sólo será una jornada. El miércoles bajarán notablemente las temperaturas, aunque seguirán siendo veraniegas.